A Albert Rivera y los dirigentes de Ciudadanos noi les gustan sus votantes.
Solo así se explica que Rivera no quiera sentarse ni a negociar con VOX, un partido del que insinuó entrevistado por Susanna Griso en ‘Espejo Público’ que no era constitucional (Abascal rompe la baraja tras el ninguneo de Rivera: «Me ponen entre la espada y la pared y cojo la espada» ).
VOX es la peste para Ciudadanos. Hay un importante sector de Cs más próximo a posiciones socialdemócratas que está presionando a Rivera para que no haga ningún tipo de acercamiento a VOX. –Albert Rivera está como un pato mareado y demuestra que es capaz de cometer la traición más alevosa–
«A mí sinceramente lo de la izquierda y la derecha me parece obsoleto, me importa un bledo«, asegura Rivera sobre el veto a ciertas formaciones. Rivera ve legítimo que Vox esté en la investidura:
«Tendrán que decidir si permiten que Ciudadanos y el PP gobiernen o lo haga la izquierda».–Las ocho contradicciones de Albert Rivera que caen como una bomba de neutrones en la sede de Ciudadanos–
Es un trágala. Ellos pactan con el PP y VOX firma el papel que le pongan delante. «La política no va de órdagos ni de enfados», dice Rivera a los de Santi Abascal.–Xabier Fortes pregunta a Rocío Monasterio por Primo de Rivera y la respuesta es brutal: «Seguramente esté usted más cerca por edad que yo»–
A quien no vetaban era al comunista Pablo Iglesias, cuando les vino bien hacer campaña debatiendo con él en ‘Salvados’.
El primer debate el 18 de octubre de 2015 en el bar Tío Cuco y fue seguido por 5.214.000 espectadores, un récord histórico al convertirse en el programa más visto de toda la historia de ‘Salvados’ de La Sexta.
A ese debate le siguió otro casi un año después, el 5 de junio de 2016. Este se grabó el en una sala del Círculo de Bellas Artes.
En aquel entonces, Rivera no veía ningún problema en sentarse a debatir con un chavista financiado por dos dictaduras, una comunista y otra islamista. –Abascal rompe la baraja tras el ninguneo de Rivera: «Me ponen entre la espada y la pared y cojo la espada»–
«Los que se oponen a VOX dentro de C’s quieren que el partido deje más abierta la vía de acordar con el PSOE, que se estudie la situación de cada comunidad y de cada ciudad caso a caso, y que se diga que VOX no puede ser socio de gobierno, ni interlocutor en una posible negociació», informa El Mundo.
Cabría preguntarse si C’s es tan zascandil para despreciar a sus propios votantes que esperan que las derechas pacten para quitar a la izquierda de ayuntamientos y comunidades autónomas. ¿O es que al final Rivera, habiendo fracaso en el sorpasso al PP, ahora aspira a ser el próximo PSOE?