La tarde de este 3 de febrero de 2020 no fue tranquila en ninguna de las redacciones de los medios de comunicación españoles. Un avión Boeing 767-300 del vuelo de Air Canada AC837 con destino a Toronto, en el que viajaban 128 pasajeros y que despegó a las 14.33 del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas, tuvo a toda España en vilo.
El aeroplano sufría daños en una rueda al despegar, algo que provocaba también una destrozos en su motor izquierdo. El avión había sobrevolado Madrid y sus alrededores durante casi cinco horas, quemando y soltando combustible en el aire para poder efectuar la maniobra con el menor riesgo posible para los pasajeros.
Finalmente aterrizaba a las 19.08 sin incidentes, pese a los daños, en la zona prevista. Enaire y el aeropuerto habilitaron una pista (32L) para que el avión dañado pudiera aterrizar sin ningún tipo de interferencias con otras aeronaves.
Los medios de comunicación (televisiones, radios, prensa online) informaron en tiempo real de lo que estaba ocurriendo, en algún caso con gran despliegue e interrumpiendo su programación habitual y la tensión se apoderó de un tarde informativa alterada por el inquientante suceso.
Sin embargo, Telecinco volvía a suspender en materia informativa. La primera cadena de Mediaset reaccionaba mal y tarde. Más vale que no hubiera informado. Ni que decir tiene que no interrumpía su programación y cedía el testigo informativo –más bien el marrón- a Sálvame.
En el espacio presentado por Jorge Javier Vázquez este lunes se enteraron muy tarde. Fue la última cadena en informar del incidente y lo hicieron pinchando, en la pantalla, imágenes del Aeropuerto de Barajas.
Tanto colaboradores como Jorge Javier estaban perdidos y la especulación y la falta de rigor sustituyeron, a diferencia de lo que estaba ocurriendo en el resto de cadenas, por la mera especulación.
Sin duda, lo más surrealista de esa tarde (no) informativa lo protagonizó Belén Esteban. La colaboradora tomó las riendas de la información sobre ese vuelvo accidentado y, casi lo peor de todo, ella era quien manejaba los datos correctos. Jorge Javier, y el resto de tropa, estaban perdidos y Esteban (a través de su teléfono móvil) iba actualizando las noticias.
Tanto es así que la propia Belén Esteban era quien anunciaba a la audiencia que las imágenes que estaban pinchadas en directo correspondían al aterrizaje del avión averiado. Jorge Javier Vázquez la rectificaba: “no, Belén, ese tiene todas las ruedas”. Pero la realidad era que la ‘princesa del pueblo’ había informado correctamente. El propio presentador reconocía su error (e ignorancia) y felicitaba a Belén Esteban “por su información”.
En definitiva, un desastre para los espectadores. El pinchazo de Telecinco una vez más vuelve a dejar en ridículo a Pedro Piqueras, a los informativos de la cadena y a Mediaset que vuelve a evidenciar que la ‘telebasura’ está por encima de la información.
