José Bono y su pelazo nuevo aparecieron por Televisión Española este lunes 25 de enero de 2020. El exministro socialista, desde su casa, con un foco tremendo apuntándole, y dispuesto a pontificar.
Y vaya si lo hizo. Participando en La Hora de la 1, entrevistado por Mónica López, el exministro repartió estopa principalmente a los podemitas y su líder supremo, partiendo al Gobierno de coalición por la mitad en un terreno favorable para ellos, el de la televisión pública de Rosa María Mateo y Pablo Iglesias…
Fíjese, yo creo que la izquierda de verdad es la que representa un partido como el mío, de izquierdas, democrático, que no está instalado en el odio social. Estamos a favor del que menos tiene, pero no predicamos el odio, como hace Podemos, hacia los que más tienen, e incluso les demonizamos, como hicieron los podemitas estos con Amancio Ortega cuando regaló una máquina a la Sanidad pública. Sí, el PSOE es el partido de izquierdas que España necesita.
Le preguntaba entonces la presentadora por cómo cree que está gestionando el Presidente los empujones de Podemos desde el Ejecutivo…
Pedro Sánchez lleva un año de Presidente, y un año con la pandemia y con Iglesias de Vicepresidente. Son bastante tormentos los que han tenido que superar. La pandemia es lo más grave, pero no crea usted que aguantar a Podemos en el Gobierno debe ser nada fácil. A mí me gustaría que no fueran necesarios, y que ese modo de actuar tan soberbios que les lleva a comparar a un señorito como Puigdemont con los exiliados de la Guerra Civil, ¡es algo muy despreciable! A una persona tan soberbia y con ese modo de actuar yo no le identifico a simple vista como Vicepresidente del Gobierno de un país como España. ¡Hay que ser más humildes y reconocer cuando uno se equivoca!
Y dejaba una anécdota más Bono:
Un vez le preguntaron cuál era su peor defecto y dijo que habían pecado de excesiva lucidez. Oiga, un poquito de modestia.
José Bono: «Yo creo que la izquierda de verdad es la que representa un partido como el mío. Estamos a favor del que menos tiene, pero no predicamos el odio, como hace Podemos, hacia los que más tienen».#LaHoraDeLa1 ➡ https://t.co/0dOWkgYltR pic.twitter.com/Brgbws6fGL
— RTVE (@rtve) January 25, 2021
Le preguntaron, además, por la forma en que salieron adelante los PGE, y ahí insistió Bono de nuevo en zurrar a Pablo Iglesias:
La explicación para mí es que no me gustó, no me gustó nada, a mí me parece un tremendo error. Pablo Iglesias se puso como una especie de apoderado al estilo taurino de los separatistas y de los sucesores de los terroristas y los metió en el paquete. Oiga, si yo fuera el Presidente estaría muy incómodo. Me imagino que a Sánchez no le gustaría nada que Bildu entrara en el paquete, y esto se lo debe a un vicepresidente que a mí me gustaría que -oiga, toda la suerte para su ámbito personal-, pero que no sea vicepresidente de España.
?José Bono, sobre los pactos con Bildu: “ Pablo Iglesias se puso como un apoderado de separatistas y sucesores de los terroristas y los metió en el paquete. […]Deseo que a Iglesias le vaya muy bien en la vida, pero que no sea vicepresidente”#LaHoraDeLa1 pic.twitter.com/QHIy4hmJ3Y
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LA JETA DE BONO ES TERRORÍFICA
Es en este punto donde tenemos que recordar qué tipo de personaje es José Bono.
Fue ministro de Defensa con Zapatero entre 2004 y 2006, presidente del Congreso entre 2008 y 2011 y presidente de Castilla-La Mancha durante 21 años; lo que acumulan tres décadas de vida dedicada a la política en las que ha tenido tiempo para todo tipo de barrabasadas. Un caradura habitual, un tipo que siempre está aprovechando la dirección del viento y critica cuando ve que puede sacar beneficio de ello. Pero quizás lo más grave de todo: durante sus años dedicado a la política ha dado forma a una fortuna enorme, con fincas, caballos, pisos y dinero…
EL ENEMIGO DE IGLESIAS QUE UN DÍA LE HIZO LA CENA
Siempre que José Bono aparece por cualquier televisión o radio para apalear a Pablo Iglesias o y sus podemitas, conviene recordarle aquel día de 2014 en que le hizo la cena al marqués de Galapagar en su casa.
Sobre la reunión de la que fue anfitrión el 9 de noviembre de 2014, en su mansión de la calle Velázquez de Madrid, con su caradura habitual y sin sonrojarse, dijo que no fue nada desleal y en tono de cura de pueblo, insisitió en que ni él ni el expresidente del Gobierno tenían ‘intenciones conspirativas‘ (José Bono: “Volveré a reunirme con Pablo Iglesias y los dirigentes de Podemos”):
«Pedro Sánchez supo de la reunión una semana después, mucho antes de que fuera conocida por la ciudadanía» (Las intrigas de Rubalcaba y Bono en cenas discretas rematan a Sánchez).
«La reunión no tenía ningún sentido de partido. Yo conocí a Pablo Iglesias, me dijo que yo había defendido a su padre en la época franquista y a la salida, quedamos en vernos un día. Le conté a ZP el asunto, y él se mostró interesado en conocerlo. Hablar de reuniones conspirativas no es sensato».
Pero algo le pasó a Bono en aquella cena o poco después, que desde entonces se colocó enfrente de Pablo Iglesias y le apalea públicamente cada vez que puede. Eso sí, sin arrepentirse de haberle cocinado al podemita…
Yo no me arrepiento de la reunión con Iglesias. La volvería a hacer.