Por favor no molesten.
Por favor no molesten
en el puntal se juntan
mañanas perseguidas
y el sitio inexistente.
Plexo desanudado
no ceja ni lo olvida
es en la soledad
donde rige el destino.
Melodía de arena
alegre con los cambios
ingresa a la carrera
tramado de ventana.
Garabateando intento
izar las luces libres
aladas y pulidas
bajo el mar de tus manos.
Mi piadosa insensata
rodeada de los vientos
valiente de las rosas
aurora de los rizos.
La penumbra importada
de rodilla y de pómulo
se escucha con las risas
y el diamante la eleva.
Tarde llego y te encuentro
con uno de tus besos
el amanecer se une
al mayor de mis sueños.
José Pómez
http://pomez.es