Daniel Forcada (Periodista Digital).- La vicepresidenta del Gobierno lo puede decir más alto o más veces, pero no más claro: “El Gobierno ni mantiene contactos con la organización terrorista ETA, ni los ha autorizado”. Es la posición del Ejecutivo, que María Teresa Fernández de la Vega ha tenido que repetir hasta en dos ocasiones ante unos periodistas que querían de ella un pronunciamiento tajante.
“Los periodistas queréis que todo sea blanco o negro y las cosas no siempre son tan fáciles”, se quejaba la vicepresidenta al término da la conferencia de prensa. La portavoz del Gobierno se ha enfrentado a una sesión de preguntas relacionadas en su mayor parte con el posible fin del terrorismo. Y ante el ruido que se ha generado en los últimos días, De la Vega ha pedido “por respeto a la verdad, a los ciudadanos y por responsabilidad” prudencia a los medios de comunicación para que cesen con sus especulaciones.
El Gobierno tiene ya diseñado su táctica a seguir una vez que los terroristas hagan público su rechazo a la violencia. Una “hoja de ruta” que, como ha explicado De la Vega, el presidente Zapatero acudirá a explicar al Congreso de los Diputados y que no incluirá ni “precios, ni atajos, ni hipotecas, ni subastas. Sólo hay un camino: el de la legalidad y el del Estado de Derecho”.
Pero hasta que ese momento no llegue, el Gobierno pide a la oposición y a los medios que estén a la altura de las circunstancias y que acaben con las hipótesis en un asunto que ha marcado las últimas cuatro décadas. “Hay que ser extremadamente prudentes, ya que las cosas no han cambiado lo suficiente como para hacer las especulaciones de los últimos días”.
Unas especulaciones que se han incrementado a raíz de que el presidente Zapatero mostrase el pasado viernes su convicción de que “el principio del fin del terrorismo” está próximo. En este sentido, la portavoz del Gobierno ha sido tajante: “El Gobierno no alimenta esas especulaciones. Se limita a dar a los ciudadanos la información a la que tienen derecho”, aunque ha reconocido que dispone de más datos que, por seguridad del Estado, no se pueden revelar.
En el complicado papel de lidiar con todas las preguntas relacionadas con el fin del terrorismo, De la Vega se ha aferrado a repetir un mismo mensaje: que la negociación, cuando la haya, transcurrirá sólo por los cauces legales. Ha sido la síntesis de una rueda de prensa protagonizada también por el titular de Interior, José Antonio Alonso y en la que ya no se ha preguntado nada sobre el Estatut. Algo que tampoco ha pasado desapercibido por la portavoz del Gobierno, que ha ironizado sobre ello en el corrillo posterior con los periodistas. Un corrillo en el que De la Vega ha dicho que tanto en el Estatut, como en el tema de la tregua, los periodistas siempre quieren de ella más de lo que puede decir o predecir. Y si Zapatero dio más solemnidad al anuncio de un posible fin de la violencia, la vicepresidenta responde que todo lo que dice su jefe está cargado de la misma solemnidad.
