(PD/Agencias).- La Justicia francesa ha tomado hoy una decisión calificada de “histórica”. Las autoridades francesas han renunciado a procesar a los dos supuestos etarras detenidos el pasado martes en la localidad vascofrancesa de Ascain, Garikoitz Etxeberria y Asier Larrinaga.
El objetivo de la decisión es agilizar la entrega a España y supone que, por primera vez, dos delincuentes van a ser juzgados en España por hechos acaecidos en Francia y podrán ser acusados de pertenencia a banda armada.
La justicia española sospecha que Etxeberría y Larrinaga están relacionados con los 240 kilos de explosivos hallados en Amorebieta y Atxondo (Vizcaya) en las últimas semanas y se investiga su relación con el atentado perpetrado en Barajas el 30 de diciembre, que costó la vida a dos personas.
Por ello, podrían ser acusados en España de pertenencia a banda armada con fines terroristas, cargos mucho más importantes de los que podrían haber respondido en Francia si se les abriese un sumario allí.
De hecho, el delito de asociación de malhechores con fines terroristas sólo podría haber sido imputado a Etxeberria, que llevaba una pistola y documentación falsa, pero difícilmente a Larrinaga, pues no estaba armado e iba indocumentado.
Las euro-órdenes españolas que reclaman la entrega de Etxeberria y Larrinaga ya están en manos de la Fiscalía de París, que ha decidido que el procedimiento siga su curso, ha precisado la fuente. Será la Fiscalía del Tribunal de Pau (capital del departamento de los pirineos Atlánticos, que incluye al País Vasco francés) la que notifique próximamente a ambos las órdenes europeas de detención y entrega dictadas por la Audiencia Nacional de Madrid.
Desde Madrid, la portavoz de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Dolores Delgado, ha considerado que, de confirmarse la noticia, sería «histórica», ya que sería la primera vez que Francia entrega a un detenido en su territorio para que España le juzgue por los hechos delictivos cometidos en ese país.
Según ha explicado Delgado, las Fiscalías de ambos países están estudiando la fórmula para que Francia ceda la jurisdicción y sean los tribunales españoles los que se encarguen de juzgar a los dos detenidos por todos los delitos que tengan pendientes, lo que supone «un paso muy importante en temas de cooperación internacional con Francia».
Una de las posibilidades sería que Francia denunciara ante las autoridades españolas la comisión de los hechos delictivos ?que podrían ser asociación de malhechores, falsedad documental y tenencia ilícita de armas- para que se persiguieran en España.
