(PD).- El PP acepta la propuesta del PSOE. Todas las televisiones que lo pidan tendrán la señal del debate. Elorriaga admite que podría ser una solución «neutral» si las negociaciones se complican. Así las cosas, sólo falta que confirmen que será La Primera el lugar donde se celebren. Y lo más difícil: Encontrar un presentador a gusto de los dos partidos.
«No está nada descartado. Probablemente, si el tema se encona tal vez sea la única solución neutral«, señala Elorriaga, preguntado por la posición socialista en las negociaciones sobre qué cadenas de televisión acogerán los dos ‘cara a cara’ pactados entre los candidatos, en un debate sobre periodismo y campaña electoral organizado por Dircom y la Asociación de la prensa de Madrid (APM).
No obstante, el responsable ‘popular’ dejó claro que al PP no le gusta esta propuesta porque considera que difundir una señal en abierto sólo interesará a las televisiones públicas y tal vez a las privadas «pequeñas», no a las grandes que compiten por la audiencia.
El PP defiende que los ‘cara a cara’ se celebren en Antena 3 y Telecinco porque son las cadenas que tienen más audiencia y porque es «la pauta» que se siguió en los debates entre candidatos en 1993 y en las elecciones al Parlamento Europeo de 2004.
A su juicio, la insistencia del PSOE en que TVE pueda retransmitir al menos un debate se debe a una «estrategia política» que pretende defender que bajo el Gobierno de Zapatero se ha logrado una importante reforma de la radiotelevisión pública.
«No queremos darles esa baza».
El secretario Ejecutivo del PSOE Óscar López, por su parte, defiende que es el PP quien está «poniendo vetos» a determinadas televisiones insistiendo en que sean Antena 3 Telecinco quienes acojan estas citas, recordó que en 1993 éstas eran las únicas televisiones privadas en abierto y subraya que en esta ocasión TVE, que además tiene una obligación de servicio público, ha hecho una oferta para acoger dos debates -uno entre los candidatos de los dos partidos mayoritarios y otro entre seis candidatos- que ha sido avalada por la Junta Electoral Central.
Sin embargo, para el PP esa obligación de servicio público implica que TVE debería acoger los debates «que tienen un menor interés para la mayoría», como los ‘cara a cara’ entre ‘segundos espadas’ o con candidatos de partidos minoritarios.
