Juan Cruz Osta(PD).- Garzón está que se deja llevar por la corriente. El juez de la Audiencia Nacional ha decretado la suspensión por tres años de las actividades de Acción Nacionalista Vasca (ANV) -que no podrá concurrir a las elecciones generales del próximo 9 de marzo- y del Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK-PCTV). ¿Pero, qué pasa con los que ya están sentados en los ayuntamientos?
Fue una actuación política calculada. El Partido Socialista de José Luis Rodríguez Zapatero organizó el akelarre, y dejó entrar por la puerta grande a los terroristas que había sacado por la puerta de atrás José María Aznar.
Aprovechó la negociación con la propia banda terrorista para acariciarles haciendo como que no veía -y dando instrucciones a la Fiscalía General del Estado para que tampoco viera- las Nekanes y los filoetarras de Acción Nacionalista Vasca no eran los hijos legítimos de Batasuna, o sea, ETA en esencia. Y quiso hacer que la ciudadanía tampoco lo viera.
Y la cuestión es que los facinerosos ya están en las instituciones y cobrando del contribuyente. Tal y como dijo Manuel Pizarro, número dos de Rajoy, «España es el único lugar del mundo que paga a los terroristas». Duro, pero real.
Para ello, contó con la inestimable labor de Cándido Conde-Pumpido, Fiscal General del Estado, y de Javier Zaragoza, Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional, que llevaron al Supremo las candidaturas oportunas para que fueran ilegalizadas, pero no las que en ese momento no convenía, que consiguieron colarse en las listas de las elecciones locales y autonómicas como si se trataran de un partido político democrático.
Pero no sólo la Fiscalía se puso el marcapasos al ritmo del Gobierno de ZP. El juez Garzón no sólo no ha escondido que él iba a resolver los casos que tenía entre manos referidos a ETA conforme «a la circunstacias», sino que lo dijo expresamente. Y tanto que ha sido así.
El famoso juez estrella, después de argumentar que no es lo mismo Batasuna que izquierda abertzale y otros mil trucos más, las «circunstancias» cambian y comienza a mandar a líderes de esa «izquierda aberzale» a chirona.
Y más. El juez decreta ahora la suspensión por tres años de los dos partidos, PCTV y ANV.
En sendos autos de Garzón notificados este viernes, de más de 200 folios cada uno, el magistrado dispone además la clausura por ese mismo periodo de tiempo «de las sedes, locales, establecimientos y cualesquiera otros centros» de los que dispongan los partidos y el bloqueo de sus cuentas, entre otras medidas.
La suspensión, sin embargo, «no afecta a las actividades que como personas individuales y titulares exclusivos de los correspondientes escaños puedan ostentar personas integradas» en ANV y en el EHAK-PCTV, que mantendrán sus puestos en los Ayuntamientos y en el Parlamento vasco.
Garzón afirma que «la suspensión cautelar de la actividad del PCTV o de ANV no se trata pues de un acto ‘ad hoc’ para evitar la concurrencia de este último partido a un proceso electoral. La suspensión se adopta con independencia de esa circunstancia, aunque resulta obvio que tiene una trascendencia fundamental en este ámbito«.
«No se pretende tampoco ilegalizar un partido político (…), sino aplicar una medida cautelar tendente a prevenir la continuación de la utilización de ese partido político para la comisión de delitos graves».
