Sandra Remón y Juan Cruz Osta (PD).- Una noche oscura en el Partido Popular. Desde que los israelitas han dado a Zapatero como ganador, el susto se ha hecho con los dirigentes de Génova 13. Conforme el voto se ha ido escrutando, el PSOE y el PP han ido recortando distancias. Los militantes que aguantan en la puerta aplauden cada escaño como si fuera de oro.
El Partido Socialista ha desangrado a los partidos radicales haciéndose con sus votos. A estas alturas de la noche, o «mucho cambian las cosas o se avecina una legislatura incluso más extremista que la que hemos vivido», cuenta a Periodista Digital un alto cargo del partido.
Mientras los dirigentes del partido de Mariano Rajoy se hacen caros de ver, los militantes y simpatizantes siguen aguantando estoicamente en la puerta de la sede madrileña del Patido Popular. Pese a la amargura por los datos, miran en la pantalla gigante de la calle los resultados y celebran cada escaño que sube el Partido Popular como si fuera una minivictoria.
Por cierto, los jóvenes que han querido arropar al líder del Partido Popular, preguntan a gritos por la niña Victoria.
A falta de un 25 por ciento de voto escrutado, el porcentaje continúa favoreciendo decimal a decimal al PP, aunque el Partido Socialista sigue por delante del partido de Rajoy. El PP roza ya el 40%,