(PD).- «No tengo ninguna intención de presentarme. Si alguna vez la tuviera, serías el primero en saberlo». Así de clara y tajante se expresó Esperanza Aguirre ante Mariano Rajoy, el miércoles en Zalacaín, uno de los restaurantes de alcurnia de Madrid.
Según ABC, con estas palabras, la líder del PP madrileño quería poner fin a todos los rumores que apuntan a que presentará una lista alternativa o, por defecto, alentará la de un «hombre de paja», en el congreso del PP.
Federico Quevedo, que es periodista bien informado y con fuentes de primera en el PP, cuenta las cosas de otra manera. Dice en Elconfidencial que Rajoy se guarda un ‘as’ en la manga y llevará a Gallardón en su lista si Aguirre se presenta como alternativa.
Ruiz-Gallardón sería el candidato de Rajoy a la Secretaría General, en el caso de que Aguirre presente su lista o monte con Rodrigo Rato y otros una «maniobra».
En el caso contrario, el líder del PP no contaría con el alcalde para un cargo orgánico.
El alcalde de Madrid se ha puesto a disposición de Rajoy y le ha mostrado su apoyo incondicional. También lo hizo Aguirre en un primer momento, sin embargo en el almuerzo mano a mano del pasado miércoles la presidenta fue muy ambigua respecto a la posibilidad de presentar o no una candidatura alternativa que contaría con el apoyo de importantes medios de comunicación y de diputados del Congreso que se han quedado sin los puestos que antes ocupaban.
Carlos E. Cue, en la línea de todos los medios del Grupo PRISA, escribe en El País que la indefinición de Esperanza Aguirre respecto al congreso de junio en el que Rajoy pretende mantener el poder que atesora en el PP ha sumido al partido en un estado de creciente agitación y nerviosismo.
Todo eso ha llevado a algunos cargos del PP a elucubrar con la posibilidad de que los dirigentes que están descontentos con las decisiones que ha tomado Rajoy -muchos de ellos diputados y miembros de la vieja guardia- convenzan a otra persona para que se presente como candidato al congreso y exprese así el malestar de una parte del partido.
Es una operación muy compleja con un riesgo político altísimo. Para optar a la presidencia del partido hace falta el aval de 600 de los 3.000 delegados del congreso. Esos 600 avales tienen que ir con nombres y apellidos, y quienes los firmaran serían conscientes de que se juegan su carrera política al enfrentarse al aparato del partido, controlado por Rajoy.
Soraya Sáenz de Santamaría, su mano derecha, casi animó ayer a que alguien presente lista alternativa: «Éste es el momento«, dijo. «Cualquiera que tenga un proyecto político» puede plantearlo.
Algo parecido sugirió Rajoy, que ayer aseguró que «nadie» le ha mostrado su disgusto por los últimos cambios.
¿APOYO TOTAL Y SIN CONDICIONES A RAJOY?
Afirma Cristina de la Hoz en ABC que el apoyo de la presidenta de la Comunidad de Madrid a Rajoy «es total, condicionado para nada», alegan las fuentes consultadas, que creen que hay rumores interesados en desgastar a la presidenta del Gobierno regional.
El propio Rajoy tuvo que responder ayer a muchas preguntas sobre su almuerzo con la presidenta territorial y quiso dejar claro que «nunca he tenido asperezas ni problemas con Aguirre, nunca».
En una comparecencia ante la prensa tras entrevistarse con Su Majestad el Rey, Rajoy alegó que en estas semanas precongresuales «estoy hablando con muchos dirigentes del partido», al tiempo que aseguró no saber nada sobre posibles malestares internos motivados por sus últimos nombramientos en el Congreso de los Diputados.
«No puedo decir nada porque lo desconozco -dijo sobre la posibilidad de una lista alternativa producto de ese malestar-. Sé cuál es mi posición y los apoyos, que son muchos, porque me lo han hecho saber y espero no defraudarles».
En todo caso, insistió en que en un congreso «se puede presentar cualquier militante».
¿SERÁ RUIZ-GALLARDÓN EL NÚMERO 2 DEL PP?
Ya de paso, y a preguntas de los periodistas, vino a desmentir que haya pensado en el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, para secretario general del PP afirmando que «uno lee cosas verdaderamente sorprendentes por lo que hay que distinguir el grano de la paja».
Fuentes de su entorno fueron más explícitas al señalar que las informaciones que apuntaban en ese sentido «eran surrealistas».
Aseveró a continuación el líder del PP que «sé lo que tengo que hacer, todo el mundo lo sabe, la inmensa mayoría de los militantes del partido lo saben».
Interrogado en este punto sobre qué pensaba hacer con algunos de sus diputados como Esteban González Pons o Manuel Pizarro, todavía a la espera de destino, dijo que su idea es «dar el mayor juego posible a los que tengan ilusión y ganas de trabajar», pero, objetó, «no todos pueden ser portavoces» de comisión.
En todo caso, de la lista de portavoces o presidentes de comisión que confeccionen Rajoy y su nueva portavoz parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría, se podrán extraer pistas, al menos por exclusión, del equipo con que cuente en Génova, puesto que no es previsible que nadie simultanee cargos.
Además, Rajoy será el candidato que defenderán los compromisarios del PP de la Comunidad Valenciana que asistirán al XVI Congreso nacional.
El presidente regional, Francisco Camps, el primero de los barones que tras las pasadas elecciones explicitó su apoyo a Rajoy, ha reiterado en público que el actual presidente nacional es la «persona idónea» para llevar al PP a la victoria electoral en 2012.
No obstante, la agrupación valenciana, que el 9-M mejoró en dos diputados los resultados obtenidos en 2004, se apresuraría a dar sus delegados a Rajoy antes del congreso sólo en el caso de que algún otro aspirante se aventurara a disputar en el cónclave el liderazgo al actual presidente de los populares.
En total serán 330 compromisarios, de ellos 286 electos (116 de Valencia, 124 de Alicante y 46 de Castellón), los que aportará la delegación valenciana al congreso nacional, número que sólo es superado por Andalucía y Galicia.
Así, las posibilidades de que acabe cuajando una candidatura alternativa son exiguas, una vez que las principales federaciones en número de compromisarios como Galicia, Andalucía, Murcia y, ahora, Valencia y parece que Madrid, ya han dicho que su candidato es Rajoy.
¿EL FUTURO DE PIZARRO?
Otro interrogante de futuro la constituye Manuel Pizarro. El ahora diputado parece decidido a continuar en la carrera de San Jerónimo, según señalaron fuentes del PP a ABC, aunque apartado de las decisiones en materia económica, que Rajoy ha encomendado al ex ministro Cristóbal Montoro.
El ex presidente de Endesa «no quiere interferir» y preferiría quedar adscrito a comisiones «menores» como la del Estatuto del Diputado, pero ni siquiera como portavoz.
En todo caso parece dispuesto a mantener el compromiso «que asumió con los electores» en su calidad de «número dos» de la lista encabezada por Rajoy.
