(PD).- Está desatado. El batacazo electoral del PNV, lejos de hacerles reflexionar, ha tambaleado los cimientos del más rancio nacionalismo. ZP se frota las manos ante lo que pueda pasar en las autonómicas del año que viene y a los soberanistas vascos ya les ha entrado el miedo. Por eso vuelven las advertencias: «Cuidado, que Zapatero empieza a parecerse a Aznar».
Con un escaño y 120.000 votos menos, el PNV se sube por las paredes. En Ajuria Enea no saben cómo decirle al lehendakari que sus consultas ilegales van a pasar factura. Y mucho.
Visto que Ibarretxe sigue en sus trece, en el PNV buscan salidas de cara a las próximas elecciones vascas que se celebrarán el año que viene. ¿Solución comodín? Que viene el lobo. La utilizó el PSOE contra Aznar y ahora se le vuelve en contra.
Anasagasti, que ha encontrado en la red el sitio que no tiene en su partido, compara a Zapatero con el ex presidente popular. Para el senador, el presidente «es muy parecido al Aznar de 1996 que se transformó en otro personaje en la Investidura del 2000 con mayoría absoluta».
En el caso vasco sale a la luz el verdadero Zapatero que no es otro más que quizás un político sin un proyecto propio para Euskadi y que actúa en función de la coyuntura. Como esta coyuntura le es ahora más favorable quiere quitarle al PP su discurso (a lo que de manera tan imbécil ha contribuido ETA y ANV) y desde el punto de vista político marear la perdiz hasta después de las elecciones autonómicas donde ya le ve a Patxi López en Ajuria Enea y él saliendo al balcón como lo hizo Maragall en el Palau de San Jaume de la Generalitá.
Se pregunta por qué no ha dado explicaciones por no haber transferido una sola competencia -la enésima ya- ni el por qué «ha propiciado un antidemocrático bipartidismo que desde luego no invita ir a Madrid a que te llamen periférico, minoría y marginal».
Uxue Barkos le reprochó a Zapatero su entrega de Nabarra a UPN. Respuesta de Zapatero: «El PSN es el PSOE y yo el máximo responsable». Como Aznar. Y con el YO por delante.
