(PD).- La vicepresidenta primera del Gobierno cree que el hecho de reconocer a Cataluña como nación es compatible con la Constitución. De la Vega ha dicho que el Ejecutivo seguirá trabajando para desarrollar el Estatut porque está convencido de la «plena» constitucionalidad del texto.
En su intervención en la primera sesión de control del Congreso de esta legislatura, De la Vega ha respondido así al diputado de ERC Joan Ridao, quien quería recabar la opinión de la vicepresidenta sobre las informaciones que apuntan a una sentencia «adversa» del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut.
A De la Vega le ha parecido «poco serio» y «poco responsable» trasladar al debate parlamentario los «rumores» y «especulaciones», y ha insistido en el «escrupuloso» respeto del Gobierno a las decisiones judiciales, aunque ha reiterado la convicción del Ejecutivo sobre la plena constitucionalidad del Estatut.
En cualquier caso, el Gobierno está para «cumplir las leyes» y «acatar» las sentencias, ha dicho De la Vega, quien ha celebrado la preocupación de ERC sobre el Estatut a pesar de que este partido no dio en su día su apoyo a la reforma.
El Gobierno seguirá trabajando para llevarlo adelante con el mayor grado de consenso posible, una labor a la que De la Vega ha invitado a ERC a sumarse. Para la vicepresidenta, se trata de un «buen» estatuto para Cataluña y para sus ciudadanos.
De la Vega también ha respondido a la inquietud de Ridao sobre la renovación del TC y ha resaltado el deseo del Gobierno de que ésta se produzca desde las Cortes, y así se lo ha pedido a los grupos, aunque ha precisado que existen mecanismos suficientes para que el alto tribunal siga trabajando.
Por su parte, Ridao ha señalado que la situación de «interinidad» del TC, objeto de la «instrumentalización» política, «daña» su imagen. Ridao ha indicado que la dilación del TC para resolver recursos «comienza a ser coartada para algunos para retrasar debates como el de la financiación autonómica o el despliegue del nuevo estatuto catalán».
Para el diputado de ERC, si la decisión del TC es desfavorable, los catalanes «tendremos un problema grave, y el Gobierno también lo tendrá», porque se puede producir un «choque de legitimidades». Joan Ridao ha pedido al Gobierno que reflexione ante ese probable escenario, porque sería un signo de «madurez democrática», en lugar de «inhibirse» y «mirar a otro lado».
