(PD).- Durante su presencia en el Campus FAES, los cursos de verano de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales, Esperanza Aguirre presentó el «crecimiento raquítico» de la economía como la prueba de que «el Gobierno no ha cuidado la dieta» que se recomienda en este tipo de casos.
«Las dietas equilibradas son beneficiosas tanto para las personas sanas como las que tienen una salud delicada. Quienes gozan de buena salud deben evitar los excesos y quienes tienen salud débil deben ser más estrictos con la dieta para conservar su precaria salud», dijo en un símil entre economía y alimentación. Aguirre denunció que, «tras cuatro años de gobierno socialista», España vuelve a «encabezar» el ránking europeo de destrucción de empleo, de déficit y de tasa de inflación, según informa El Semanal Digital.
Adujo que «lo peor es que el remedio que nos propone José Luis Rodríguez Zapatero es cometer aún más excesos porque no parece dispuesto a abrazar la austeridad y la bajada de impuestos, sino que culpa de la crisis de las hipotecas subprime, al precio del petróleo y al encarecimiento de los alimentos» cuando el resto de los países de la UE también sufren estas adversidades y tienen una mejor situación que España.
Soluciones liberales
La presidenta de la Comunidad de Madrid propuso como soluciones «reducir el gasto público, equilibrar los prespuestos, flexibilidar el mercado de trabajo, rebajar los impuestos, reformar el sistema de pensiones dando mayor peso al ahorro individual y elevar la calidad de la educación». Aguirre subrayó que estas «recetas son saludables en todo momento», pero más todavía en una situación de «crisis» como la que atraviesa España.
La dirigente popular criticó que el Gobierno de Zapatero no reconozca la realidad e insistió en que la economía sufre una «crisis sin eufemismos, sin paliativos y sin disfraces».
La que fuera ministra del Gobierno de José María Aznar entre 1996 y 2000, adujo que cuando el PP llegó entonces a La Moncloa tuvo que corregir «los excesos de la demagogia y el oportunismo de corto alcance» que había aplicado en la economía Pedro Solbes, actual vicepresidente segundo y ministro de Economía. Recordó que «esa dieta tuvo tal éxito que España, contra todo pronóstico, entró en el euro por la puerta grande y pasó en poco más de dos años del coma económico a encabezar la creación de empleo y de crecimiento en Europa».
Expuso que ese «milagro» fue consecuencia de la «puesta en práctica de recetas liberales» como las que, en su opinión, deberían llevarse a cabo ahora «con carácter urgente» para paliar el efecto de la crisis y sentar las bases de una «pronta y rápida recuperación».
