(PD).- Zapatero ha anunciado que la reunión con el líder del PP y de la oposición, Mariano Rajoy, ha dado frutos y acuerdos, entre ellos uno sobre la renovación del TC y del CGPJ para setiembre, y otro, en la lucha contra el terrorismo.
La renovación del CGPJ «culminará» y «se materializará» en septiembre, ha explicado el presidente del Gobierno, y será entonces cuando se concreten los nombres de los nuevos vocales del órgano de gobierno de los jueces, que lleva en funciones más de un año y medio. En este sentido, Zapatero ha considerado que este pacto con el PP es una buena noticia para el «buen funcionamiento» de las instituciones y que además permitirá abrir una etapa de refuerzo de la posición institucional del TC. Según ha dicho el presidente, se trata de un acuerdo de «criterios» y «los nombres vendrán después».
La renovación del CGPJ y el TC es uno de los puntos del amplio acuerdo para conseguir la modernización de la Justicia que han alcanzado Zapatero y Rajoy, quienes también han consensuado una serie de reformas legales, entre ellas, el endurecimiento de las penas para delitos sexuales y la creación de un registro de pederastas.
El consenso incluye también el compromiso de lograr la plena implantación de la Oficina Judicial, y el desarrollo de un avanzado sistema informático de interconexión entre todos los registros para que puedan intercambiar información de manera ágil y rápida. El objetivo de este acuerdo, según Zapatero, es hacer que la Justicia sea más ágil y que funcione mejor.
Ley de solidaridad con las víctimas del terrorismo
El entendimiento en materia antiterrorista incluye instar a las administraciones públicas a la retirada de símbolos que enaltezcan a los terroristas y una reforma de la ley relativa al patrimonio de éstos. El presidente del Gobierno ha explicado que el entendimiento con Rajoy en materia antiterrorista se ha fundamentado en dos acuerdos concretos para hacer reformas legales y en cinco principios que deben regir la lucha contra ETA.
La primera reforma se hará en la ley de solidaridad con las víctimas del terrorismo, en la que se incluirá una disposición referida a la obligación de que todas las administraciones públicas adopten medidas para la retirada de escudos, insignias, placas u otros objetos como nombres de calles, plazas o parques que enaltezcan personal o colectivamente a los terroristas.
De igual forma, ha adelantado que el Gobierno va a estudiar con el PP la legislación penal para reformar en los delitos terroristas y en defensa de los derechos de las víctimas las penas accesorias y las medidas de aseguramiento frente a terroristas que salgan de la cárcel tras cumplir sus penas.
También se revisarán los mecanismos de preservación del patrimonio universal presente y futuro de los terroristas para la satisfacción integra de sus responsabilidades civiles. El presidente del Gobierno ha explicado que el entendimiento con el PP en materia antiterrorista se ha fijado en la reunión de hoy sobre cinco principios: unidad de los demócratas, apoyo a las víctimas, cooperación internacional, confianza en el Estado de Derecho y respaldo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, reafirmar que el único destino de ETA es desistir de la violencia.
En este ámbito, el líder popular ha asegurado que el acuerdo alcanzado con el presidente «descarta cualquier suerte de negociación política» con ETA y ha asegurado que apoyará al gobierno la lucha «sobre las bases que han sido aceptadas».
Así, tras destacar que esta «estrategia compartida» significa el establecimiento de una «relación singular» entre el Gobierno y el principal partido de la oposición en la lucha contra ETA, Rajoy ha recalcado que, para él, el principio más importante es el que establece que «el terrorismo no tiene vías políticas» y los terroristas «no conseguirán nada por matar ni por dejar de matar». Para Rajoy, este principio es «muy importante» poque «descarta cualquier suerte de negociación política con la organización terrorista ETA».
Sin acuerdos para combatir la crisis
Ambos líderes también han abordado la economía. El presidente ha explicado que ha ofrecido a Rajoy encuentros puntuales para seguir la evolución de las medidas que se apliquen para combatir la crisis.
Por su parte, Rajoy ha mostrado divergencias en materia económica con el presidente. «Yo pienso que hay que tomar medidas urgentes contra la crisis porque creo que hay una crisis económica, y el presidente del Gobierno cree que no», ha subrayado Rajoy.
Zaptero ha insistido en la estrategia de austeridad y solidaridad. Sin enmbargo, ha vuelto a mostrarse optimista y ha dicho que la economía «está pasando por un momento de dificultades pero la sociedad española es fuerte».
Preguntado sobre la financiación, Rodríguez Zapatero, ha confiado en culminar «con éxito» la negociación sobre la reforma del sistema de financiación autonómica, pese a las diferencias que ayer pusieron de manifiesto las comunidades autónomas y después de que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, descartara la posibilidad de alcanzar una propuesta concreta antes del 9 de agosto, como establece el Estatut de Catalunya.
Zapatero ha asegurado que el Gobierno trabajará para conseguir este acuerdo, aunque reconoció que será una negociación complicada en la que cada comunidad defenderá sus intereses particulares en función de sus necesidades. Aún así, aseguró que el Gobierno se tomará «el tiempo necesario» para que el diálogo y la negociación sobre la reforma prosperen ahora que las comunidades ya han expresado su opinión en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, que se celebró ayer en el Ministerio de Industria.
Zapatero, tras reconocer que la financiación no ha sido uno de los temas que ha tratado con Rajoy en el encuentro de hoy, aseguró que el Gobierno tiene una serie de «principios firmes» en la elaboración del nuevo modelo de financiación, que pasan por respetar los estatutos de autonomía y la ley orgánica de financiación de las autonomías, garantizar el diálogo y escuchar las propuestas de cada comunidad para llegar al acuerdo.
Asimismo, destacó que el Ejecutivo, hasta ahora, ha cumplido con cada uno de los compromisos sobre la reforma del sistema, ya que ha presentado un documento a las comunidades autónomas para poner en marcha la negociación, ha convocado a todos los agentes para conocer las opiniones de cada uno de ellos y ha comenzado las negociaciones bilaterales que contempla la reforma.
Rajoy ha llegado puntual, a las 11:00 horas, a la Moncloa y ha sido recibido por Zapatero al pie de las escalerillas que conducen al edificio del complejo de la Moncloa en el que se ha celebrado la reunión. La de hoy ha sido la novena reunión entre Zapatero y Rajoy.
El 14 de enero de 2005 acordaron crear una comisión de diálogo sobre la reforma de la Constitución, de los Estatutos de autonomía y del sistema de financiación autonómica y sanitaria y se comprometieron a actuar con lealtad recíproca para hacer frente a desafíos como el plan Ibarretxe, aprobado hacía poco por el Parlamento Vasco.
El segundo encuentro de dos horas y media tuvo lugar el 28 de marzo de 2006, seis días después de que ETA declarara su alto el fuego permanente.
