(PD).-Zapatero está contra las cuerdas por el tema de la financiación del Estatut. De momento, para tumbar la petición de comparecencia, el PSOE cuenta con los 24 votos de su grupo pero, para aspirar a la mayoría absoluta, depende bien del PNV o de CiU que se muestran reticentes. Y El País, mientras tanto, tercia en la disputa autonómica y tacha de «pleno acoso» a ZP las exigencias de la oposición.
El PSOE necesitaría el voto de un grupo parlamentario del Congreso para ‘tumbar’ la petición de comparecencia del presidente del Gobierno que reclama el PP y también Iniciativa per Catalunya Verds (ICV). En ese contexto, el PNV y CiU han decidido reservar su posición hasta la reunión decisiva de la Diputación Permanente, se informó a Europa Press en fuentes parlamentarias.
La petición de comparecencia en una sesión plenaria extraordinaria fue registrada este lunes en el Congreso por el PP. Paralelamente, Iniciativa per Catalunya (ICV), que comparte grupo con ERC e IU, está pidiendo el apoyo de otro partido para poder presentar su propia solicitud de comparecencia del presidente Rodríguez Zapatero.
Conforme a la distribución de la Diputación Permanente acordada en el Congreso antes del verano, este órgano que sustituye al Pleno en los periodos no ordinarios de sesiones está compuesto por 51 diputados, situándose así la mayoría absoluta en 26 diputados.
El PSOE tiene 24 representantes frente a 19 del PP, mientras que el resto de grupos (CiU, PNV, ERC-IU-ICV y Mixto) mantienen dos votos cada uno. Con este escenario, los socialistas podrían alcanzar la mayoría absoluta y vetar la comparecencia de Zapatero con el apoyo de sólo uno de los grupos minoritarios de la Cámara.
En ese contexto, el PNV y CiU, cuya posición es clave en la votación que deba producirse en la Diputación Permanente del Congreso, han optado por reservar su posición hasta el último momento.
CiU, entre dos aguas
Los nacionalistas catalanes señalan por un lado que, tratándose de un tema capital para Cataluña donde hay una posición común con la Generalitat, sus diputados no votarían en contra, pero por otro adelantan sus dudas sobre las intenciones del PP y avisan que no apoyarán una iniciativa planteada sólo para desgastar al Gobierno y para hacer multilateral un debate que ellos quieren bilateral Estado-Generalitat.
El PNV, por su parte, no se siente involucrado por esta polémica por cuanto que el País Vasco cuenta con su propio régimen de financiación autonómica, el Concierto y el Cupo, por lo que esperará a ver en qué términos se plantea la solicitud de comparecencia,
