Triunfalismo en el Gobierno ZP ante la crisis. Conscientes de que los presupuestos de 2009 salían adelante con los votos de los nacionalistas, el portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, se ha dedicado a atacar al PP y a desmarcar a ZP de la crisis: «Lo hemos hecho realmente bien», ha dicho eufórico desafiando a los indicadores económicos en rojo que arroja la economía española. Los españoles, al paro y ellos, encantados de conocerse.
El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, acusó hoy al presidente del PP de querer «desplazar el coste de la crisis a los sectores sociales más desfavorecidos» al querer recortar gasto en empleo o sanidad y le retó a aclarar ¿a qué gasto renunciarían? para mejorar los Presupuestos Generales de 2009.
Durante su intervención en el Debate a la enmienda de la totalidad del proyecto de Ley de los Presupuestos Generales para el próximo año, Alonso criticó al PP por querer privatizar los servicios públicos como el de sanidad y señaló que ante los presupuestos sólo proponen medidas de «tipo fiscal» que harían disminuir los ingresos públicos.
«En tal caso, nos dirían ustedes de dónde sacarían los recursos para modernizar el país», le recriminó. El dirigente socialista elogió los actuales presupuestos por ser «rigurosos, austeros, solidarios y que miran al futuro con confianza», y aunque reconoció que no son los «de la abundancia, sí son los mejores posibles».
«No renunciaremos a proteger a los trabajadores desempleados, a subir las pensiones mínimas ni a dotar de recursos a las personas que más lo necesitan», señaló.
Acusó a Rajoy de no «estar a la altura de las circunstancias» y criticó que durante el gobierno del Partido Popular basaran su modelo de crecimiento de la economía «poniendo un ladrillo tras otro» y no mejorando la productividad con apoyo a la investigación.
Concluyó que la intervención de ayer del presidente del PP ante la Cámara estuvo «vacía de contenidos» y no fue más que «un profundo lamento por haber perdido las elecciones» y reiteró que estos son los presupuestos de la «confianza, seriedad y estabilidad».
Los apoyos de PNV (seis diputados) y BNG (dos) han permitido al PSOE rechazar las seis enmiendas a la totalidad presentadas a los Presupuestos Generales del Estado que, el ministro Solbes califica de «apropiados y últiles».
En la votación, en la que ha sido básica la asistencia de todos los diputados, se ha escenificado la ruptura de PP y UPN, diecisiete años después. Uno de los diputados navarros se ha abstenido, mientras otro, Santiago Cervera, ya había anunciado que rompería la disciplina de partido votando a favor de la enmienda del PP, lo que le ha supuesto un expediente disciplinario por parte de UPN. Las cuentas públicas han salido adelante con el apoyo de 177 diputados, una abstención y 170 noes.
