(PD).- La actividad de los juzgados volverá parar el viernes, justo un mes después de la primera protesta de jueces y secretarios judiciales para denunciar las injerencias políticas en el caso de la niña Mari Luz Cortés y pedir más medios para desarrollar su trabajo.
El 21 de octubre, los jueces celebraron reuniones haciéndolas coincidir con un paro que los secretarios judiciales convocaron, entre otros motivos, para protestar contra la sanción de dos años de suspensión de empleo y sueldo que el Ministerio de Justicia impuso a su compañera, Juana Gálvez, secretaria del juzgado de Sevilla que condeno a Santiago del Valle (presunto asesino de Mari Luz Cortés) por abusar sexualmente de su propia hija, pero después no lo metió en prisión.