Su arrogancia le lleva a hacer el ridículo. La titular de Fomento, Magdalena Álvarez, se ha molestado en mandar una carta a la presidenta de la Comunidad para recordarle lo que le dijo en mayo del pasado año desde el Congreso de los Diputados: «donde podía haber estado es o tumbada en la vía o colgada en la catenaria -del metro-». Maleni dice que con eso no le quiso desear ningún daño físico.
El objetivo de Magdalena Álvarez era «aclarar el malentendido» y convencer a Aguirre de que de su intervención no se desprendía, como la jefa del Ejecutivo regional creyó, que le deseaba algún daño físico, según informa La Razón.
Para ello, Álvarez remitió ayer una misiva a la presidenta de la Comunidad en la que quiso demostrar la buena intención de sus palabras transcribiendo de forma completa y entrecomillada su declaración en el diario de sesiones:
«… Es una instalación que depende del Ministerio de Fomento. Lo que no sé es por qué fue la presidenta de la Comunidad, señorías, porque el único sitio en la estación intermodal de la T4 donde podía haber estado, porque es de la Comunidad de Madrid, y porque son los elementos de la Comunidad de Madrid, es o tumbada en la vía o colgada de la catenaria…»