(PD).- Lo que parecía apenas una tensión soterrada entre la mayoría de afiliados del PP madrileño que apoyan a Esperanza Aguirre frente a los minoritarios «cobistas», se intenta extender a los pueblos de la Comunidad, en un por ahora, vano intento de ganar posiciones de los críticos ante los seguidores de Esperanza.
En un enfrentamiento que este viernes se saldará con las votaciones de los afiliados del PP de Boadilla del Monte, se pretende dirimir quién tendrá más fuerza en el futuro pepero de dicha población, si los partidarios de la Presidenta o quienes apuestan por una candidatura que en su día encabezó Manuel Cobo con escaso éxito.
El actual alcalde Arturo G. Panero, representa la línea de Aguirre, frente a la del otro candidato, en este caso candidata, la teniente alcalde María Jesús Díaz, amiga personal y muy vinculada a Manuel Cobo, que aspira a ganar estas elecciones, aunque para ello tenga que fingir frente a sus afiliados, con el engaño de que es ella y no el alcalde quien goza de la confianza de la presidenta de la Comunidad.
El alcalde presenta además de la lista más abultada de compromisarios, una labor de recuperación del partido, hasta el extremo de haber barrido prácticamente al resto, sacando en las últimas elecciones 14 escaños, frente a 4 del PSOE.
María Jesús, ha presentado su alternativa, después de que fuera destituida como portavoz, por toda la Corporación Municipal en pleno. Ahora presenta su alternativa junto con un Concejal, ahora acusado ante los tribunales de Justicia por el alcalde, por haber supuestamente fabricado un falso dossier sobre inexistentes propiedades del edil.
Aunque ante los Tribunales, ahora el concejal ha negado la autoría del referido dossier, existen más de veinte declaraciones escritas de afiliados que le denuncian afirmando haber recibido las fotocopias falsas de sus manos.
Este concejal, que aparece dentro de las listas de María Jesús, tiene a corto plazo una serie de visitas pendientes con la Justicia, ya que además de la querella del alcalde por falsificar documentos, hay otras acusaciones por relaciones irregulares con personal femenino dependientes de él, denuncias que se vienen comprobando últimamente.
Sea quien sea quien finalmente gane este viernes, la imagen de división del partido ya será inevitable, toda vez que al menos uno de los candidatos, no aceptará la derrota y no cejará en seguir divulgando rumores, aunque para ello tenga que fabricarlos, por su demostrada habilidad con el manejo de las fotocopias.
