(PD).- «Esto es un desastre total”, ha dicho José María Aznar acerca de dos cuestiones fundamentales: la situación política y económica de España y la que sufre internamente el partido que él refundó en 1989. Palabras del ex presidente que caerán como una tronada en Génova 13.
Lanacion.es ha podido conocer de su propia voz la posición del ex presidente Aznar ante los problemas más urgentes del país y de su propio partido. Los escándalos de espionaje que están saliendo en Madrid tienen muy afectado a Aznar y opina que pueden ser un episodio más del “desbarajuste” en el que se halla inmerso el propio PP. Concretamente dice Aznar: “Caminamos sin que haya mucha conciencia de ello hacia la demolición”.
Son palabras que poseen una enorme trascendencia dado, en primer lugar, la escasa afición de Aznar a opinar sobre los asuntos domésticos de su partido y, sobre todo, por la propia importancia de estas muy pesimistas predicciones.
Aznar se muestra “profundamente preocupado” por la deriva económica, que está siguiendo el Gobierno de Zapatero: “Los cuatro millones de parados” -dice- “están a la vuelta de la esquina, probablemente antes del verano“. Incluso formula un pronóstico todavía más pesimista:
“… Y si no se toman medidas rápidas y eficaces, que no se van a tomar, podemos llegar incluso a los cinco millones de desempleados”.
¿Qué sucedería entonces?, se le pregunta. El ex presidente, un hombre que no suele dar respuestas rápidas y que tampoco, cuando las ofrece, lo hace sin tomarse unos momentos de reflexión, añade: “…Entonces veremos qué piensa exactamente el país“.
Son manifestaciones en modo alguno oficiales (Aznar no quiere comprometerse más allá de lo debido), en las que también se ocupa directamente de lo que sucede ahora mismo en el partido Popular.