(PD).- El comunicado del obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, en el que se posicionaba en contra de la ilegalización de las listas de formaciones proetarras, ha levantado ampollas en el País Vasco. María del Mar Blanco ha acusado a la Iglesia «nacionalista» vascas ser «salvaguarda de verdugos y asesinos» y ha asegurado que el comunicado del obispo no ha sorprendido a la víctimas.
La presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco, María del Mar Blanco, acusó este jueves a la Iglesia «nacionalista» vasca de actuar de «salvaguarda de verdugos y asesinos», en relación a la condena por parte del Obispado de San Sebastián como «un mal para la comunidad política» la detención de políticos de la izquierda ‘abertzale’ y la ilegalización de sus listas electorales.
En declaraciones a Onda Cero, María del Mar Blanco dijo: «Yo creo que a las víctimas no nos ha sorprendido esta noticia porque, como es cierto, la Iglesia nacionalista a lo largo de estos años siempre ha actuado -con tristeza lo digo, pero es cierto-, siempre ha actuado de salvaguarda de los verdugos y asesinos».
Según añadió, de todos es conocido que «la Iglesia nacionalista se ha negado a hacer funerales» a los familiares de las víctimas del terrorismo, pero, a su juicio, «en cambio sí que ha actuado siempre de salvaguarda de los asesinos y de los terroristas». «La verdad es que es una vergüenza, pero tristemente es lo que tenemos dentro de la iglesia vasca», concluyó.