(PD).- Ya está tardando en dar explicaciones. El periodista Antonio Rubio ha pillado a Alberto Saiz, director del CNI, con el carrito del helado. El jefe de los espías españoles ha utilizado al menos en seis ocasiones dinero público del Centro Nacional de Inteligencia para satisfacer sus aficiones deportivas, cazar y pescar, según denuncian directivos y agentes de los servicios secretos.
La mayor parte de estas actividades se desarrollaron entre julio de 2006 y julio de 2008 en el continente africano y, en algunos de esos viajes, Saiz utilizó un avión Falcon del Ejército del Aire. El Mundo publica este martes las pruebas gráficas de esas actividades de Saiz y detalles de cómo utilizó medios públicos.
«Yo jamás he usado dinero público para practicar la caza o la pesca […]. Todas las acusaciones se han realizado desde el anonimato […]. Cúmulo de falsedades […] y sin pruebas». Así negó Saiz en la Comisión de Defensa del Congreso, el pasado 20 de mayo, para intentar refutar las revelaciones que El Mundo publicó el 14 de abril, en las que se decía que «directivos y agentes del Centro acusan al director de cazar y pescar con dinero público».
FOTOS TRUCADAS
Alberto Saiz, al conocer que el diario de Pedrojota Ramírez estaba detrás de esa documentación y de sus presuntas irregularidades, dio la orden a sus agentes de eliminar y manipular pruebas, rastros y vestigios de sus andanzas de cazador y pescador por África.
La manipulación de las pruebas llegó a tal nivel que accedieron a la página web senegalesa ‘Albatros Pêche’, donde habían volcado varias fotografías del director del CNI mostrando los trofeos conseguidos en alta mar. En una de esas fotos, en la que aparece Saiz en Senegal, en alta mar y en la popa del catamarán ‘Blue Albatros’ con un pez espada en sus manos, sustituyeron su cabeza por la de un miembro del CNI que es sargento de la Guardia Civil y que está de pie a su lado. En otra imagen, se difumina su cara. En el barco había al menos cinco agentes de los servicios secretos y su jefa de gabinete, la periodista Mercedes Pérez.