Ada Colau y el sexo. La alcaldesa de Barcelona podía ser perfectamente la actriz de aquella cinta cutre salchichera titulada ‘Lucía y el sexo‘ dada la obsesión de la política podemita con los ‘bajos instintos’.
La primera edil de la Ciudad Condal acaba de poner en marcha otra de esas iniciativas que no dejan indiferente al personal. Se trata de un taller juvenil de índole sexual. No es de extrañar en una política que hace unos meses hizo un parque infantil donde había figuras que representaban un pene y una vagina. ‘Ideal’ para los más pequeños.
Ahora, en el Espacio Joven Garcilaso se imparte un taller en el que se enseña a moldear penes y vulvas en arcilla, amén de fomentar clases de ‘twerking’ o ‘perreo’, bailes que, supuestamente, fomentarían el machismo. Pero a Colau parece importarle más la parte sexual. ¡De traca!