Pese a que los datos económicos, cifras de paro, de inversión y datos macro se empeñan en que Andalucía se está convirtiendo en uno de los territorios más atractivos para la inversión, el PSOE-A y su líder, Susana Díaz, se empeñan en lo contrario. Es lo que queda de herencia del gobierno de los EREs, que por mucho que parezca que fue hace tiempo, en realidad la propia Sultana es resultado de todo aquello…
La secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, ha advertido de que el balance del primer año de gobierno de derechas en la comunidad deja claro que “Andalucía está peor que hace un año” de la mano de un presidente, Juan Manuel Moreno Bonilla, y un gobierno de PP y Cs que “comparte ideario y políticas con la extrema derecha”. Cosa que, a todas luces, es mentira.
Ha añadido que el Gobierno de derechas de la Junta actúa “sin humanidad ni sensibilidad” y propiciando un “cambio a peor” cuyo modelo han rechazado los andaluces y andaluzas “en cinco convocatorias electorales en un año” en la comunidad. Ha alertado de que el de PP y Cs representa “un gobierno incapaz, caótico, tramposo y nada fiable” e igualmente “inestable” con casi 40 dimisiones y ceses, lo que supone “casi una salida por semana”, aparte de que “incumple su principal objetivo, que es gobernar, y se dedica a la labor de hacer oposición a la propia oposición” mientras se muestra incapaz de sacar adelante iniciativas legislativas más allá de los dos presupuestos aprobados.
Pocos descalificativos más le quedan por proferir a la derrotada en su propio partido por Pedro Sánchez, que haría mucho mejor en hacer su trabajo lo mejor posible y en mantener un perfil bajo, prácticamente callada, porque con lo que tiene en su casa, sí, la del expolio público descomunal de los ERE en Andalucía, tiene bastante.
