La voladura de todos los puentes que llevó a cabo Pablo casado en la mañana de ayer, disparó todas las alarmas en los cuarteles generales de los partidos políticos en Andalucía, puesto que se jugaban el desmoronamiento del gobierno andaluz si la formación Vox apretaba “el botón del pánico” y dejaba de apoyar a Moreno Bonilla.
Vox ha demostrado, al menos en un primer momento, que no les ha movido el revanchismo y pese a adelantar que ya no va a ser tan fácil gobernar como ha sido hasta ahora, puesto que los apoyos de Vox lo van a tener que sudar a partir de ahora, han asegurado que no van a dejar caer el gobierno andaluz.
La partida acaba de comenzar y veremos como se desarrolla en el futuro, pero parece evidente que ya nada será igual entre las dos formaciones de la derecha en España debido al furibundo ataque lanzado por Casado con el claro objetivo de romper definitivamente con Vox.
‼️ La situación ha cambiado. Desde hoy @AndaluciaVOX se replanteará su relación con el @ppandaluz tras los ataques de Pablo Casado a VOX y a todos sus votantes.
?️ @AlejandroHVOX: "Todo es posible en esta nueva situación. Exigiremos con mayor rigor nuestras nuevas peticiones". pic.twitter.com/XEXhSz6hzC
— VOX Parlamento de Andalucía (@AndaluciaVox) October 22, 2020