La Cadena SER alteraba su programación nocturna para dar amplia cobertura al tremendo temporal de nieve que está sufriendo el centro de la península, sobre todo Madrid. Tras concluir la información deportiva de El Larguero, la radio de Prisa dedicaba toda la madrugada a informar sobre lo que estaba ocurriendo en la Comunidad.
El programa, conducido por Aimar Bretos, rápidamente establecía puntos de conexión con los numerosos puntos negros en las carreteras madrileñas, donde cientos de conductores permanecían atrapados a consecuencia del terrible temporal de nieve, la nevada más grande del siglo en Madrid.
El programa, que nacía con vocación de servicio, pronto iba a dar un giro político y la SER comenzaba a hacer lo que mejor se le da: manipular a la audiencia y culpar de lo que estaba ocurriendo en las carreteras madrileñas a la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso.
Para ello contaron, entre otros, con la inestimable colaboración del Delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, que participaba en las críticas, aunque matizaba que “ahora no es el momento”, contra Díaz Ayuso por haber solicitado la ayuda de la UME a las 23 horas.
Este era entonces el principal argumento de la SER para arremeter contra Ayuso: “¿Por qué se ha pedido tan tarde la ayuda del Ejército?”, se preguntaba continuamente el presentador mientras irrumpía en antena Ana Terradillos para confirmar que la presidenta madrileña había reclamado la ayuda de la UME “a las 23:10 de esta noche”.
Ese era el caballo de batalla en la noche de la SER, una fijación política que empañaba la excelente labor informativa. Isabel Díaz Ayuso pasaba a ser una ‘proscrita’ y desde la radio de Prisa se difundía el bulo de que estaba “de vacaciones, desde el pasado martes”.
Tanto es así que la emisora de Prisa editorializaba sobre ello: “sabemos dónde están los militares, sabemos dónde están los trabajadores sanitarios y de los servicios esenciales. Muchos doblando turnos. ¿Dónde está Díaz Ayuso? Una vez más, ausente. Liderazgo ausente. Liderazgo desaparecido en este caos que afecta especialmente a Madrid. Ayuso, desaparecida”.
Y todo eso mientras los servicios dependientes de Madrid, como el Metro, funcionaban y el aeropuerto estaba cerrado o los trenes de RENFE paralizados pero, sin embargo, no escuchaban crítica alguna a la ‘desaparición’ del ministro de Fomento, José Luis Ábalos.
Pero en realidad la presidenta madrileña ha estado toda la noche en permanente contacto con los servicios de emergencias de Madrid y a primera hora de la mañana presidía una reunión en el 112 de Pozuelo. No, Díaz Ayuso ni estaba desaparecida ni de vacaciones.
Según ha podido saber Periodista Digital de fuentes próximas a la Comunidad, las acusaciones de la SER contra Ayuso han agotado la paciencia de la presidenta y su entorno no descarta incluso que Díaz Ayuso tome cartas en el asunto y empresa acciones legales contra la radio de Prisa.
