El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha estado en la cuerda floja pero finalmente, en virtud del acuerdo de Gobierno de colación entre PSOE y Podemos, Pedro Sánchez no lo ha cesado en la profunda remodelación de su Ejecutivo este fin de semana.
Garzón, que trabaja más bien poco en un ministerio vacío de competencias y que no tendría que ir más allá de una dirección general, cuando abre la boca lo hace para generar controversia y amenazar a los principales sectores productivos y económicos de España.
Ya criticaba abiertamente al sector turístico español, al que restaba la importancia que tiene en nuestro PIB diciendo que “carecía de valor añadido” y ahora la ha tomado contra el consumo de carne y el sector cárnico.
Ahora la ha tomado con el consumo de carne de los españoles y se ha propuesto que, en primer lugar, reduzcan la ingesta de la misma hasta, en un segundo estadío, que opten por comprar otros productos en los mercados. Alberto Garzón, en un tono paternalista, muy propio de esos regímenes comunistas que tanto le gustan a él, ‘aconseja’ a los ciudadanos qué ingerir en su dieta diaria.
Para ello se ha hecho grabar un vídeo de 6 minutos en el que aporrea al público con una catarata de datos que mezcla con recomendaciones de su cosecha:“¿Qué pensaríais si os dijera que el consumo excesivo de carne perjudica a nuestra salud individual y a nuestro planeta? Estoy preocupado por la salud de nuestros conciudadanos y de nuestro planeta. Sin planeta no tenemos vida, ni salarios ni economía, y nos lo estamos cargando”.
En su Twitter presentaba el vídeo de la siguiente forma: “El 14,5% de las emisiones de gases de efecto invernadero proviene de la ganadería, especialmente de las macrogranjas, mientras que para que tengamos 1 kilo de carne de vaca se requieren 15.000 litros de agua”.
Como les hemos contado las críticas llegaban desde todas partes al ministro del Consumo. Especialmente significativas fueron las que se lanzaron desde el sector ganadero, el ministro de Agricultura, Luis Planas o hasta el propio presidente del Gobierno, Sánchez.
Pero ha sido precisamente en las redes sociales donde más rechazos ha ‘cosechado’ Garzón. Muchos usuarios han rescatado imágenes del ahora ministro comiendo carne o le han recordado el menú de su propia ‘boda pija’… pero hay una imagen que se ha hecho viral y que deja al líder de Izquierda Unida tiritando: Alberto Garzón, cerveza en mano, consumiendo pincho morunos, salchichas y panceta.
“La orgía carnívora del ministro vegano”, como afirman con mucha guasa muchos tuiteros.