Acaba este 2021, un período en el que Pedro Sánchez ha llevado a cabo una larga lista de traiciones a la nación. El socialista ha traspasado todas las líneas rojas posibles cediendo a los separatistas, bilduetarras y demostrando, una vez más, que está dispuesto a pactar con el mismo diablo a fin de permanecer en su poltrona.
Una serie de felonías que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, viene denunciando desde hace tiempo.
En el balance del año, la popular califica este 2021 como “el año del agravio del Gobierno central» contra Madrid, mientras Sánchez alimenta con fondos «la ruptura de España»
Y por otro lado, resalta la política llevada a cabo por la región.
«Cumplimos con nuestro deber de obligada rendición de cuentas. Por eso, les informo de que tenemos en marcha el 72% de las medidas comprometidas en la primera y segunda legislatura. De hecho, 57 de la primera y 14 de la segunda ya están 100% cumplidas. Desde este gobierno gestionamos de modo transparente, eficaz y cercano a los problemas reales. Algo que no ocurre en todas las administraciones».
La presidenta recuerda el ataque a España a través de la capital
Además, Ayuso ha recordado el “infame ataque” a España a través de Madrid por medio de la “falsa descentralización”, que solo sirve de “abono” para “contentar” a los socios parlamentarios de Sánchez. También, ha hecho mención al abandono del Gobierno a las infraestructuras de Madrid, “entre otras numerosas inversiones», ha enfatizado.
En base a la reciente aprobación de los Presupuestos Generales, la presidenta de la Comunidad de Madrid critica que la inversión del Estado en la Comunidad se ha reducido un 8,4% con respecto a 2021 y supone el 8,9% de las inversiones gubernamentales en las comunidades autónomas, “a pesar de que Madrid es el 14% de la población y el 19% del PIB nacional».
Sin embargo, esto no ocurre en otros territorios como Cataluña, Valencia y el resto de regiones donde gobiernan los socios de Sánchez. Porque este 2021 también se ha caracterizado por “la compra de posiciones en el Parlamento nacional con el dinero de todos los españoles».
