Máxima tensión en el Gobierno PSOE-Podemos por el crecimiento del PP y VOX en las elecciones autonómicas

El ‘anhelo común’ de Espinosa de los Monteros y Jorge Javier Vázquez que hace temblar a Sánchez en la Moncloa

El portavoz de VOX aprovecha las declaraciones del presentador de ‘Sálvame’ para sacudir a Moncloa

El ‘anhelo común’ de Espinosa de los Monteros y Jorge Javier Vázquez que hace temblar a Sánchez en la Moncloa
Iván Espinosa de los Monteros y Jorge Javier Vázquez PD

Jorge Javier Vázquez despotricó contra VOX durante su entrevista en ‘El Plural’.

Si bien el presentador de ‘Sálvame’ cargó contra Santiago Abascal y su partido, acabó lanzando una frase que impactaría de lleno en Moncloa: “Me dan ganas de que VOX gobierne para que la gente disfrute lo votado”.

Unas palabras que, además de coincidir con el batacazo del PSOE y Unidas Podemos en Castilla y León, fueron utilizadas con ironía por Iván Espinosa de los Monteros para dar un susto a Pedro Sánchez.

“¡A mí también!”, comentó el portavoz de VOX.

 

La frase de Espinosa de los Monteros sacude a un Gobierno PSOE-Podemos que no cesa de caer en las encuestas y que ya suma importantes derrotas en Madrid, Castilla y León y País Vasco.

Es importante recordar que en las elecciones en Galicia y el País Vasco, celebradas el 12 de julio de 2020, el PSOE fue incapaz de rentabilizar su presencia en el Gobierno de España y se vio adelantado por el Bloque Nacionalista Gallego y por Bildu. En el primer caso, Alberto Núñez Feijóo arrasó con 42 diputados, uno más que en 2016, y el PSOE no sumó ni uno más a los 14 que ya tenía. Quedó como tercera fuerza en el Parlamento autonómico, por detrás del BNG.

En el País Vasco, el PSOE sólo fue capaz de arrancar un diputado más. Logró 10, muy lejos de los 21 de Bildu y de los 31 del PNV. Ambos partidos, ahora socios de gran influencia de Sánchez, vieron reforzados sus resultados con hasta 3 escaños cada uno.

El 4 de mayo del año pasado, el PSOE sufrió uno de sus peores batacazos. El partido de Sánchez cosechó su peor resultado histórico en unas elecciones en la Comunidad de Madrid, bajando por primera vez de los 30 escaños (24), y del 20% de los votos (16,80%). Los socialistas perdieron 13 diputados y 270.000 votos en estas elecciones, rendidos ante el arrollador éxito de Isabel Díaz Ayuso. Además, se vieron desbancados por Más Madrid en su papel de líderes de la oposición. El partido de Mónica García les superó por 4.000 votos, confirmando así el sorpasso que los socialistas temían durante toda la campaña.

La única victoria del PSOE de Sánchez radica en las elecciones celebradas en Cataluña, el 14 de febrero. El PSC -con Salvador Illa como candidato- sí ganó las elecciones. Sacó 33 escaños -16 más que en 2017-, los mismos que ERC. Sin embargo, el independentismo vio también reforzada su mayoría (65 escaños entre ERC y Junts) y acabó formando gobierno, que preside Pere Aragonès.

Ahora los datos de Castilla y León (junto con la confianza y fuerza que van ganando el PP y VOX) son demoledores para un Sánchez que se volcó en la recta final de la campaña autonómica, con un despliegue inédito de actos.

En paralelo, el Gobierno activó su maquinaria institucional, utilizando incluso el Consejo de Ministros con fines propagandísticos. En los días previos a los comicios, el Ejecutivo anunció varias medidas de calado -como un plan para el mundo rural, la ley de Vivienda o la subida del salario mínimo- con evidentes fines populistas. Ni con esas ha conseguido evitar la victoria del PP. El presidente del Gobierno ha comprobado otra vez en las urnas la contestación social a sus políticas.

Sin embargo, nada evitó el batacazo socialista. Ese que, como temen el PSOE-Podemos, podría repetirse en unas elecciones generales.

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Autor

José Antonio Puglisi

Periodista italovenezolano especializado en economía y periodismo de investigación.

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