"Petro es a Colombia lo que Arnaldo Otegi es a España”

VOX planta al “terrorista” Gustavo Petro en el Congreso y le deja atónito

El partido de Santiago Abascal no se queda a escuchar el discurso del presidente de Colombia por haber militado en el M-19

VOX no perdió el tiempo escuchando al “terrorista” Gustavo Petro.

El presidente de Colombia hizo una parada en el Congreso de los Diputados durante su visita a España para pronunciar un discurso. Sin embargo, ni Santiago Abascal ni sus diputados estaban dispuestos a tolerar la intervención del exmilitante del Movimiento 19 de abril (M-19), una guerrilla urbana disuelta en 1990 (organización terrorista de la que no se arrepintió haber formado parte).

Para mostrar su rotundo rechazo a Petro, los 52 diputados de VOX pasaron de no aplaudir y permanecer sentados a la entrada del mandatario colombiano en el hemiciclo, y por abandonarlo justo cuando la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, daba paso a la intervención del líder latinoamericano.

Iván Espinosa de los Monteros también faltó al acto de imposición de las medallas de las dos Cámaras. El portavoz de VOX en el Congreso no estuvo en el salón de los Pasos Perdidos, la estancia más solemne del Palacio de la Carrera de San Jerónimo, como sí lo hicieron el resto de portavoces parlamentarios. También se ausentó su representante en la Mesa del Congreso, Ignacio Gil Lázaro, a diferencia del resto de vicepresidentes y secretarios del órgano de gobierno de la Cámara.

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En declaraciones a los medios, tras abandonar esta sesión en la Cámara, Abascal afirmó que «Petro es a Colombia lo que [Arnaldo] Otegi es a España: un terrorista no arrepentido»; un mandatario con «un pasado de sangre, que ha dejado dolor, que ha dejado muertos en Colombia», que es «cómplice de [Nicolás] Maduro, que acaba de expulsar a algunos opositores venezolanos de Colombia». También «una pieza clave del Foro de São Paulo, la organización internacional del comunismo para hacer avanzar las tiranías y los regímenes socialistas y comunistas en Iberoamérica». Criticaba el «blanqueamiento» de su figura, y cargaba contra el Gobierno de Pedro Sánchez por ser «siempre sumiso ante los enemigos de las libertades, desde China hasta Venezuela pasando por Cuba o por Colombia».

En la misma línea, el líder del partido verde rechazaba que su formación esté cometiendo un acto de «desplante» contra los colombianos, y decía representar «el sentir de muchos» ciudadanos de Colombia que hoy viven en España, que «han tenido que abandonar su patria» y «saben qué crímenes cometió la organización a la que Petro pertenecía». También criticó sus palabras previas a la visita de España, sobre el pasado colonial de Colombia, e incluso visitó a medio centenar de manifestantes que protestaban contra su presencia.

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