Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del Grupo Unicaja, ha presentado el último número de su publicación trimestral «Previsiones Económicas de Andalucía», correspondiente al Otoño de 2009 (Nº 58).
Como documento adjunto, se acompaña el último número publicado en formato PDF para facilitar su descarga (100 págs).
Como en números anteriores, esta publicación incluye también la edición en soporte digital, con la intención de ofrecer los análisis de este informe de la forma más útil y cómoda posible.
Así, el soporte digital mencionado (CD) permite la consulta tanto del informe completo como de la base de datos con los principales indicadores económicos utilizados para la realización del mismo e incluso de documentos y análisis complementarios.
El contenido de la publicación se divide en tres partes, Entorno Económico, Economía Andaluza y Análisis Territorial.
En la primera, se analizan diversos temas relacionados con la evolución de la actividad en el contexto internacional y nacional, necesarios para enmarcar la trayectoria de cualquier espacio económico, tales como las previsiones más recientes de organismos internacionales, que avistan la salida de la crisis o la situación de las finanzas públicas.
En Economía Andaluza se abordan aspectos relacionados con la estructura productiva regional (industria, construcción, turismo,…), el mercado de trabajo o la demanda interior y exterior, incorporando la revisión de las expectativas de crecimiento de la economía andaluza para 2009 y las previsiones de crecimiento para el próximo año 2010.
Finalmente, Análisis Territorial incluye un análisis de la actividad económica en cada una de las provincias andaluzas, con las estimaciones y perspectivas de crecimiento a corto plazo. Además, la publicación incluye un documento resumen que incorpora los principales resultados del informe completo presentado en CD.
Entorno Económico
Después de que a finales de 2008 y en el primer trimestre de 2009, la actividad económica y el comercio internacional se retrajeran de una forma excepcional, desde principios de verano la economía mundial comienza a ofrecer señales de cierta estabilización.
Desde un enfoque optimista, algunos consideran que la recesión ya es historia, y que la recuperación está en marcha, pero no hay que olvidar que los responsables de la política económica -incluidos el Banco Central Europeo (BCE) o el Fondo Monetario Internacional (FMI)- han expresado su preocupación acerca de la fragilidad de esta mejoría y la existencia de riesgos que podrían lastrar esta incipiente salida de la mayor crisis de las últimas décadas.
En este sentido, la forma en que se produzca el desmantelamiento de las políticas monetarias acomodaticias y fiscal es un factor de incertidumbre, junto con los problemas «cerrados en falso» en el sector financiero y el fuerte incremento del paro, que desanimará la demanda privada y supondrá una rémora para el despegue de la actividad.
En comparación con las proyecciones efectuadas en Abril y Mayo por los principales organismos de previsión, las revisiones efectuadas a principios de verano y más recientemente por el BCE y la OCDE tienen un claro matiz positivo, ya que por primera vez desde que comenzara la crisis, las correcciones son efectuadas al alza, y no a la baja. Gracias a la rápida respuesta de las economías emergentes y en desarrollo ante las políticas de estímulo, se estima que entre Abril y Junio el
crecimiento de la producción mundial habría retornado a tasas positivas. No obstante, el conjunto de las economías avanzadas, pese a la mejora observada en países como Francia, Alemania o Japón, no alcanzaría un crecimiento positivo hasta el último cuarto del presente año y, de acuerdo con las proyecciones del FMI, habría que esperar hasta finales de 2010 para que el crecimiento de las economías más desarrolladas alcance un ritmo del 2%.
En el caso de la economía española, la publicación de la Contabilidad Nacional para el segundo trimestre ha coincidido con una revisión de las estimaciones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) para el pasado año, un poco más significativa de lo habitual. Lo menos relevante es que la economía creciera en el conjunto de 2008 tres décimas menos (0,9%) de lo estimado (1,2%). Lo más destacado es que el final de la etapa de crecimiento y el comienzo de la recesión, por tanto, había tenido lugar ya en el segundo trimestre, constatándose con rotundidad el retraimiento del gasto en consumo y de la inversión en el pasado año.
Con esta revisión se hace más patente sin duda el calado de una recesión económica sin precedentes, que en el caso de España se vislumbra más duradera que en el resto de la Zona Euro. En términos interanuales, el descenso de la producción entre Abril y Junio fue del 4,2%, siendo destacable la acelerada caída de la demanda nacional. Desde la óptica de la oferta, las ramas industriales y la energía agudizan su contracción, mientras la construcción no ha terminado de realizar el severo ajuste que la sobreoferta de vivienda hace prever.
Economía Andaluza
El PIB ha disminuido en el segundo trimestre del año un 4%, según la Contabilidad Regional Trimestral del Instituto de Estadística de Andalucía, descendiendo un 0,9% respecto a los tres primeros meses del año, frente al -1,2% del trimestre anterior. Esta evolución refleja la fuerte contracción de la demanda regional, tanto por la brusca caída del consumo privado como de la inversión.
Por el contrario, la aportación positiva del sector exterior ha aumentado, dada la caída más pronunciada, en términos relativos, de las importaciones que de las exportaciones. Desde el punto de vista de la oferta, la industria muestra una contracción destacada, aunque parece haberse frenado el ritmo de descenso del VAB (Valor Añadido Bruto).
Por su parte, tanto el sector agrario, como la construcción y los servicios muestran variaciones interanuales más negativas que las del primer trimestre, si bien es cierto que los descensos trimestrales han sido algo menos acusados, lo que indicaría que lo duro del ajuste habría pasado ya.
En opinión de la mayor parte de expertos y organismos, esta crisis está siendo la peor de los últimos cincuenta años, con caídas en la producción que en el caso de Andalucía no se han observado desde principios de los ochenta, en tanto que la pérdida de puestos de trabajo, en términos relativos, está resultando hasta ahora similar a la de la crisis de mediados de los ochenta.
Las previsiones de Analistas Económicos de Andalucía apuntan a que en 2010 proseguirá el descenso de la actividad pero con menor intensidad, estimándose una caída del PIB del 0,8% (-0,9% para España), en tanto que para 2009 la caída prevista se sitúa en el 3,7% (igual a la de España).
Esta última estimación supone una mejora en dos décimas respecto a la publicada en el anterior informe de Analistas (-3,9%). Ésta revisión responde principalmente a la propia corrección del crecimiento estimado por la Contabilidad Regional del IEA para 2008 (del 0,6%, es decir, 4 décimas menos que la anterior estimación).
Más concretamente, la industria se estima que descendió en 2008 algo menos de lo publicado anteriormente, de ahí que la caída prevista para 2009 sea ahora del -10,6%. Por el contrario, en los servicios el menor crecimiento estimado para 2008, y la leve mejora que muestran algunos indicadores ha provocado que el descenso previsto del Valor Añadido Bruto (VAB) para 2009 se revise hasta el -1,7%, lo que representa una menor caída frente a la previsión anterior (del -2,5%).
En términos trimestrales, la caída del PIB en Andalucía tocó fondo en el último trimestre de 2008, un trimestre antes que la economía nacional. No obstante, en términos interanuales, la mayor caída del PIB podría producirse en el tercer trimestre, aunque no sería hasta finales de 2010 cuando se observarían tasas interanuales positivas.
Por tanto, se prevé una lenta recuperación, aún más en el caso del mercado laboral, dado que la creación de empleo suele venir acompañada de tasas de crecimiento del entorno del 2-2,5%, que no es previsible que se alcancen en los próximos trimestres.
Los últimos indicadores disponibles reflejan una cierta ralentización en el deterioro del mercado laboral, observándose desde el pasado mes de Mayo caídas interanuales algo menos acusadas en el número de afiliados a la Seguridad Social. No obstante, las previsiones de Analistas Económicos de Andalucía apuntan que será en el tercer trimestre cuando se observe el mayor descenso del empleo, para a partir de entonces empezar a moderarse, de modo que el número de ocupados podría descender en el promedio de 2009 un 7,6%.
El descenso de empleo sigue siendo especialmente intenso en la construcción, entre los asalariados, del sector privado y con contratos temporales, y entre los hombres. Por el contrario, el empleo únicamente aumenta entre las mujeres de más de 55 años, creciendo la población activa femenina en este caso casi un 20%, ya que la crisis está obligando a muchas amas de casa a incorporarse al mercado laboral, al caer otros miembros de la familia en situación de desempleo.
La tasa de paro ha superado entre Abril y Junio el 25%, y Andalucía cuenta ahora con alrededor de 381.000 parados más que en el segundo trimestre de 2008, tras destruirse casi 250.000 empleos y producirse la incorporación al mercado laboral de 131.600 nuevos trabajadores, en su mayor parte mujeres. El desempleo ha crecido de nuevo de forma más intensa en los sectores de la construcción y los servicios, aunque quizás resulte más destacable que casi el 40% del aumento del paro en el último trimestre se ha producido entre quienes buscan su primer empleo o lo han dejado hace más de un año.
Respecto a las perspectivas para los próximos meses, las previsiones de Analistas Económicos apuntan a una reducción a la mitad en la tasa de aumento del paro. Estiman que en el cuarto trimestre de este año Andalucía podría tener alrededor de 1,2 millones de parados, casi 310.000 parados más que a finales de 2008, y la tasa de paro quedaría situada en el 29% de la población activa.
El sector industrial sigue experimentando una trayectoria negativa, mostrando en el segundo trimestre un descenso del 12,7%. Esta caída de la actividad ha provocado la destrucción de unos 43.000 puestos de trabajo en relación al mismo trimestre de 2008, a lo que habría que unir un aumento del desempleo, aunque menor, observándose así una salida de mano de obra del sector.
Según las estimaciones de Analistas Económicos, es previsible que el empleo siga descendiendo, hasta finalizar el año en torno a los 277.000 ocupados, lo que supondría un 11,3% de descenso respecto al pasado año.
El sector de la construcción ha experimentado en el segundo trimestre una caída en el VAB del -13,8%. No obstante, en términos trimestrales parece que la caída de la actividad ha tocado fondo, lo que estaría vinculado en parte a la puesta en marcha de los proyectos acogidos al Fondo Estatal de Inversión Local. Sin embargo, existe una elevada incertidumbre en torno a la posibilidad de que la finalización de los citados proyectos pueda provocar un nuevo repunte del paro y un descenso de la actividad.
No obstante, la caída del empleo podría haber registrado su mayor descenso en el primer trimestre, si bien aún sigue siendo acusada, estimándose para el conjunto de 2009 un descenso del 30,9%, hasta los 288.000 ocupados, por lo que en dos años y medio se habrían perdido casi 230.000 puestos de trabajo. La sobreoferta existente está dificultando el ajuste del sector, al tiempo que la demanda sigue contrayéndose a un ritmo elevado, que parece haberse frenado.
El sector servicios ha registrado una caída del Valor Añadido Bruto (VAB) en el segundo trimestre del 1%, si bien algunos indicadores han mostrado una aminoración en el ritmo de descenso con relación a los primeros meses del año, de ahí que el VAB haya crecido un 0,3% respecto al primer trimestre de 2009, frente al descenso del -0,2% registrado a nivel nacional.
Del mismo modo, pese a que el sector andaluz cuenta con unos 26.000 ocupados menos que hace un año, los casi 2,2 millones de trabajadores suponen un incremento del 1,1% respecto al primer trimestre, incremento que se aprecia año tras año a comienzos del período estival. No obstante, en los dos próximos trimestres la caída del empleo podría ser más acusada, de ahí que se estime un descenso medio del empleo en 2009 cercano al -3%, de forma que a finales de año el sector contaría con algo menos de 2,1 millones de ocupados.
El turismo es una de las actividades de los servicios que está registrando una mayor caída en su volumen de negocio, si bien se ha observado una ligera mejora coincidiendo con el verano. En la primera mitad del año Andalucía ha recibido 10,1 millones de turistas, 1,6 millones menos que en la primera mitad de 2008, de los que dos terceras partes se han alojado en establecimientos hoteleros, observándose en este caso un descenso algo menos acusado. Un 28% de los turistas proceden de la Unión Europea, y son éstos precisamente los que han mostrado un mayor descenso relativo. En el caso de los establecimientos hoteleros, pese a la notable reducción de la demanda, desde principios de verano se vienen observando unos descensos más moderados que en los primeros meses del año, sobre todo en el caso de la demanda nacional. Pese a ello, en términos relativos, Andalucía es una de las Comunidades Autónomas donde la demanda hotelera más ha caído, viéndose afectadas las principales zonas turísticas, exceptuando la Costa Tropical de Granada.
La demanda regional ha acentuado en el segundo trimestre del año su contribución negativa al PIB, hasta los -7,1 puntos. Tanto el consumo privado como la inversión han acelerado su ritmo de descenso, al tiempo que se ha moderado el ritmo de crecimiento del consumo de las Administraciones Públicas.
Respecto al sector exterior, las importaciones han mostrado un descenso aún más acusado en el segundo trimestre, en tanto que las exportaciones han mantenido un ritmo de caída bastante similar al del primer trimestre, de ahí que la aportación positiva de la demanda exterior neta al PIB haya crecido hasta los 3,1 puntos
Análisis Territorial
Durante el segundo trimestre de 2009 la contracción económica ha sido más intensa que en el trimestre anterior en todas las provincias andaluzas, tal como reflejan los principales indicadores económicos disponibles. Los descensos de la actividad en Almería, Córdoba y Málaga, estuvieron cercanos al -5% según las estimaciones de Analistas Económicos, y Cádiz, Jaén y Sevilla experimentaron descensos más moderados que el conjunto de Andalucía (que se situó en el -4%). Para el conjunto del año, las previsiones siguen reflejando un tono desfavorable, que se prolongará a 2010, aunque se prevé una desaceleración en el ritmo de descenso de la actividad en todas las provincias.
El paro registrado ha mostrado un repunte en términos interanuales, más significativo en Almería y Málaga, aunque la evolución intermensual ha reflejado un signo positivo durante tres meses consecutivos (Mayo-Julio) en Cádiz y Málaga, si bien en Agosto el paro ha vuelto a subir en todas las provincias andaluzas, como ha ocurrido en años anteriores. Según la EPA (Encuesta de Población Activa), durante el segundo trimestre de 2009 la caída del empleo se ha intensificado respecto al trimestre previo en todas las provincias, exceptuando Almería, Huelva y Málaga. En cuanto al paro, el incremento ha sido más moderado, aunque continúa siendo elevado. Así, la tasa de paro ha alcanzado el 27% en Almería, Málaga y Córdoba, y se espera que supere incluso el 30% al finalizar 2009 en las dos primeras. En cuanto a empleo, se espera una caída menos acusada de la ocupación que en el cuarto trimestre de 2008 en Almería y Granada.
Por sectores, la actividad turística ha continuado mostrando un tono desfavorable y durante los siete primeros meses de 2009 se ha constatado una generalizada contracción de la demanda, no tan acusada en Huelva (por el repunte de la demanda nacional), si bien en los meses de verano se ha producido un cierto freno en el ritmo de descenso. Es en la provincia onubense y en Cádiz (Costa Atlántica) donde se ha registrado una menor reducción en el grado de ocupación hotelera, que no sólo está ligada a la propia situación económica, sino también al incremento de la oferta, ya que, excluyendo Almería y Cádiz, el número de plazas hoteleras se ha incrementado en todas las provincias andaluzas. A su vez, en el sector de la construcción, la caída del empleo continúa siendo bastante acusada, y el número de viviendas visadas sigue descendiendo en todas las provincias andaluzas, reflejando el duro ajuste que está sufriendo el sector.
La caída de la producción obedece fundamentalmente al marcado descenso experimentado por la demanda interior, tanto en la componente de consumo como en la de inversión. En relación al consumo privado, hay que señalar que el descenso en la matriculación de turismos continúa siendo elevado, aunque tras la entrada en vigor del Plan 2000E la caída se ha moderado, mostrando los meses de verano tasas menos negativas. Las previsiones para el conjunto de 2009 apuntan por tanto a una reducción menos intensa en la mayor parte de las provincias andaluzas que la estimada con anterioridad al citado Plan (-29% en Andalucía).
