El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, lamentó hoy que tanto en Aragón como en Valencia como en Murcia «todo el mundo ha hecho lo que territorialmente se espera de ellos» en relación a sus respectivos estatutos de autonomía, a excepción de la presidenta regional del PP y secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal.
En declaraciones a Antena 3 recogidas por Europa Press, Barreda se refirió así a la retirada del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha y lamentó que tanto en el texto de Aragón, donde el PP puso como condición una reserva hídrica, como en Valencia, como en Murcia, donde los socialistas han apoyado al presidente de la región, Ramón Luis Valcárcel, «en su lucha para defender sus intereses», todo el mundo ha hecho lo que se espera de ellos «todos menos Cospedal».
Barreda se preguntó si es culpa suya que Cospedal «cambiara de opinión» y votara en el Congreso de los Diputados «algo distinto a lo que votó en las Cortes de Castilla-La Mancha», si es culpa suya que la líder del PP «atienda a los planteamientos de Valcárcel y no a los planteamientos de la Mesa del Agua en Castilla-La Mancha».
«Ha llegado a decir que es algo personal mío, el Estatuto de Autonomía, confundiéndolo todo», señaló José María Barreda, que advirtió de que «no es una cuestión personal, es una cuestión del conjunto de la sociedad y siempre quise que la reforma se hiciera por unanimidad».
A su juicio, el hecho de que Cospedal sea también secretaria general del PP motivó que afloraran las contradicciones, pues «ya no se debía solo a Castilla-La Mancha, ya tenía que estar también pensando en la opinión de Camps y de Valcárcel» quienes «dijeron desde el primer momento que en los temas de agua mandaban ellos y lo han demostrado».
Según el presidente autonómico, tanto Valencia como Murcia tenían «una postura radicalmente en contra a la aprobación de nuestro Estatuto, no querían que se hablara de reserva hídrica de ninguna manera, no querían que quedara clara la preferencia de la cuenca cedente, cosa que es lo lógico, la cuenca que cede tiene prioridad sobre la cuenca receptora y cuando dijo Valcárcel ‘en los temas de agua en el PP mando yo’, yo creía que era un farol pero lamentablemente ha demostrado que ha sido así».
Finalmente, se mostró convencido de que esta cuestión afectará al PP en Castilla-La Mancha de cara a las próximas elecciones porque en esta región «a la gente le gusta que se mantenga la palabra, que se mantengan los compromisos, que se diga lo mismo en Toledo, en Madrid o donde quiera que sea, que se vote lo mismo en las Cortes de Castilla-La Mancha y en el Congreso de los diputados, eso a los ciudadanos les afecta pero es una cuestión mas».
«Desde que hay elecciones en España y en Castilla-La Mancha ha habido un botón diferenciado en función de que las elecciones sean europeas o generales o municipales y autonómicas, y en las municipales y autonómicas a nosotros nos va mucho mejor porque estamos cercanos, somos próximos, porque la gente sabe que estamos con ellos, permanentemente, día a día, solucionando problemas».
