El Consejo Ejecutivo de la Generalitat catalana se reunirá hoy de forma extraordinaria a las 10.00 horas después de que en la tarde de ayer los tres socios del Govern hayan ultimado cómo aplicará el recorte presupuestario aprobado por el Gobierno central.
Según confirmaron a Europa Press fuentes gubernamentales, el paquete de medidas que aprobará el Govern supondrá reducir en unos 1.500 millones el déficit previsto por la Generalitat. En total, hasta 2013, se pretende que el Govern se ahorre más de 3.000 millones de euros.
Para lograrlo, la Generalitat apuesta por una doble vía: una reducción drástica de los gastos y por otra parte, un incremento de los impuestos para los más ricos.
El recorte de los gastos se basa en dos grandes pilares: la reducción del sueldo de los funcionarios –un 5% de promedio– y hasta al 15% la de los altos cargos. En segundo lugar, los conciertos a entidades privadas del sector educativo, sanitario y servicios sociales se reducirán entre un 3 y un 5 por ciento.
Fuentes del Govern consultadas por Europa Press dejaron claro que la reducción no afectará a las empresas públicas –algo que debe negociarse en las respectivas mesas de negociación, al contar con convenios colectivos propios– y tampoco a los trabajadores del sector concertado.
En cualquier caso, escuelas, centros sanitarios y equipamientos sociales concertados verán como se reduce la aportación de fondos públicos, y si la dirección de estos centros así lo decide, deberá negociarse con sus trabajadores un recorte salarial, en el marco de la negociación colectiva.
SUBIDA DE LOS IMPUESTOS
El presidente de la Generalitat, José Montilla, ya adelantó ayer la subida de los tributos para las clases más altas. Fuentes de la negociación confirmaron a Europa Press que en el seno del tripartito, el principal desacuerdo era a partir de qué renta anual debían subirse los tributos.
Para que esta subida impositiva sea posible, el decreto ley con las medidas del recorte deberá ir acompañado de alguna otra normativa legislativa, cuya formulación aún no se ha concretado. ICV-EUiA sostuvo hoy que debería aprobarse una norma con rango de ley aprobada por el Parlament donde se concretasen los cambios en los impuestos.
ICV-EUiA ha apretado hasta el final para lograr extender sus reivindicaciones: crear un nuevo tramo en el Impuesto de la Renta y subir un 5% a quienes su renta anual supere los 100.000 euros, aunque por ahora el Govern aún no ha confirmado si finalmente las peticiones de los ecosocialistas han sido ratificadas.
La negociación la han llevado personalmente el presidente de la Generalitat, José Montilla, junto a las cúpulas de sus socios y las consellerias de Economía, Gobernación, Innovación e Interior.
Fuentes del Govern concretaron que la principal polémica entre los socios era a partir de qué renta anual mínima debía subirse el tramo autonómico del IRPF. ICV-EUiA exigía subir en un 5 por ciento este tributo a las rentas superiores a los 100.000 euros anuales.
Pese a la polémica mantenida, sobre todo por las demandas de ERC y muy especialmente de ICV-EUiA de incrementar los impuestos a los ricos, fuentes de la negociación indicaron que en todo momento, los tres socios tenían claro que celebraría el Consejo Ejecutivo extraordinario para aprobar las medidas.
En cualquier caso, lo que tenían claro los socios es que no debía repetirse un escenario como el del Impuesto de Sucesiones, en el que la negociación sobre cómo rebajarlo duró meses, «y había un 50% de posibilidades que fracasasen. Ahora, no existían», aseguraron a Europa Press fuentes conocedoras de la negociación.
Además de la subida del IRPF, el impuesto transmisión de inmuebles tributará al 8%, aunque si son viviendas de protección oficial, lo harán al 7%, y el impuesto especial sobre determinados medios de transporte pasará del 14,75 al 16%.
