Ferrovial negó hoy haber financiado a CDC y su entorno a través del Palau de la Música. Así lo expresó el director de relaciones institucionales de Ferrovial, Juan Elizaga, en la comisión parlamentaria sobre el caso Palau.
Elizaga explicó que la compañía aportó durante diez años al Palau 11 millones de euros en concepto de mecenazgo y patrocinio. El Palau se comprometía a organizar el concierto de principio de curso bajo el patrocinio de la constructora.
El directivo de Ferrovial también descartó que haya relación entre las aportaciones de Ferrovial al Palau con las adjudicaciones de obra pública a la compañía durante los gobiernos de CiU, sobre todo de dos de sus proyectos más emblemáticos: la Ciudad de la Justicia y la Línea 9 del Metro.
«No me consta en absoluto» que el Govern de CiU condicionara las adjudicaciones a cambio de contribuir de forma directa o indirecta a la financiación de CDC, aseguró Elizaga, en respuesta al diputado de CiU Jordi Turull.
El directivo de la constructora aseguró que su relación con el Palau empezó hace 20 años. «A finales de los años 80 empezamos a patrocinar el Palau», aseguró Elizaga, quien aseguró que ello se hacía mediante convenios rubricados por ambas partes, en las que se estipulaban las obligaciones que debía tener la compañía. Ferrovial también fue la constructora que hizo el Petit Palau.
Elizaga indicó que él no es responsable de la contratación de obras, y aseguró que por las informaciones que él conoce, los concursos de la L9 y de la Ciudad de la Justicia fueron «normales y corrientes». En respuesta a Jordi Terrades (PSC), negó que en los convenios con el Palau hubiese cláusulas en las que la institución se comprometía a apoyar a la constructora para desarrollar su actividad en Catalunya.
Desde las filas de ERC, Pere Bosch resaltó que en las libretas localizadas en el despacho de la directora financiera del Palau, Gemma Montull, había anotaciones que, a su juicio, vinculan parte de los ingresos que recibía el Palau de Ferrovial con los pagos que luego hacía a la Fundación Trias Fargas y también con facturas de empresas que son proveedores habituales de la Trias Fargas y CiU: Hispart, New Letter y Letter Graphic.
Según Bosch, es muy relevante que en las anotaciones de Montull, Ferrovial sea el único patrocinador que aparece con tanto detalle. Así, indicó que entre septiembre de 2004 y noviembre de 2008, de 1,7 millones que Ferrovial habría aportado al Palau, pocos días después 270.000 euros se habían transferido a la Trias Fargas, 300.000 a New Letter y Letter Graphic, y casi medio millón a Hispart.
Para ICV-EUiA, Daniel Pi consideró que existe una «relación causa-efecto» entre las aportaciones del Palau y el desvío de fondos al entorno de CDC, y aseguró que los ecosocialistas están plenamente convencidos de ello.
Ante estos datos, el directivo indicó que Ferrovial se limita a aportar fondos al Palau en cumplimiento de los convenios, y que no hace seguimiento y «desconoce» a qué dedicaban este dinero los antiguos gestores del Palau. «Por mucho que se quiera mirar las notas de Montull», no hay relación entre Ferrovial y el entorno de CDC, remachó.
«Ferrovial una vez abona el dinero al Palau, no sabe qué uso hace del dinero», dijo Elizaga, quien aseguró que ante las informaciones publicadas, Ferrovial está indignada, y que pedirá que el dinero que fue desviado sea finalmente derivado a finalidades culturales.
