El PSdeG verá el lunes expedientes de la adjudicación del vial de Costa da Morte, en la que percibe «tufillo gürteliano»

El portavoz en materia de infraestrucutras del PSdeG, Pablo López Vidal, afirmó hoy que la nueva adjudicación –que todavía no se ha cerrado– de las obras de construcción de la autovía Carballo-Berdoias desprende «un tufillo gürteliano» y avisó de que los socialistas llegarán «hasta el final» del asunto.

«Los socialistas llegaremos hasta donde haya que llegar», afirmó en rueda de prensa. En este sentido concretó, a preguntas de los periodistas, que se refiere a las responsabilidades políticas, aunque la legal es también «una vía».

Señaló que hoy mismo remitirán una carta al consejero de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, para informarle de que un grupo de diputados del PSdeG acudirá el lunes a las instalaciones de la Xunta en San Caetano para consultar documentación sobre el vial, que este grupo acusa de adjudicar con un sobrecoste de más de 352 millones de euros.

López Vidal censuró que la reacción del presidente de la Xunta hasta ahora fue de «nerviosismo» y consideró que «no dio ninguna explicación convincente». Por la contra, a juicio del diputado socialista, Feijóo «miente» a los gallegos cuando afirma que se produjo un fraude en la adjudicación hecha por el gobierno anterior y acusó al actual responsable del Ejecutivo de estar «cocinando un gran pelotazo».

Además, afirmó que «hay una empresa vinculada con la Diputación de Pontevedra» que se verá beneficiada con esta nueva adjudicación –una de las que se integran en la UTE que tiene mayor puntuación–, por lo tanto «hay que hacer una asociación con Louzán –presidente de la institución provincial–» y con el actual consejero de Infraestructuras, que ocupó cargos de responsabilidad en la diputación.

El portavoz de infraestructuras de los socialistas defendió que esta autovía es una obra «clave» para el reequilibrio territorial en Galicia y censuró que no se negociase con la anterior adjudicataria –pidió, por su situación económica, un incremento del 16% de la tarifa–, pues finalmente la Xunta «le compró el proyecto» por 2,2 millones de euros. Además, afirmó que se pagaron 5 millones a la empresa que iba a hacer inicialmente la obra en concepto de reparación de daños.

RECLAMACIONES DE LAS EMPRESAS

La adjudicación hecha por el bipartito, agregó López Vidal, era «inapelable» y nadie presentó quejas, mientras que «no se puede decir lo mismo de esta». En este sentido, indicó que algunas de las empresas que participan en el concurso –la adjudicación no está hecha aún– están pidiendo información para presentar reclamaciones.

El resultado, reprochó, es que la infraestructura se retrasa dos años y hay «400 millones perdidos por el pelotazo». Asimismo, el diputado socialista señaló que la Xunta decidió primar los criterios subjetivos para la adjudicación, en lugar de los económicos, de modo que la propuesta que será encargada de hacer la autovía será la más cara (la de FCC), pues en la puntuación de los criterios la oferta más ventajosa en términos monetarios (la de Dragados) no alcanzó los 120 puntos exigidos.

En este punto, López Vidal criticó también que para realizar el estudio de los proyectos el Gobierno gallego contrató «a dedo» dos asesorías externas. La decisión es, dedujo, «política», pues el Gobierno gallego tomó la determinación de no ir adelante con la adjudicación de la anterior legislatura.

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