El vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP y presidente del partido en Andalucía, Javier Arenas, desligó hoy las vacaciones que pasará en Marbella la familia del presidente de EEUU, Barack Obama, de la relación que éste mantiene con su homólogo español, José Luis Rodríguez Zapatero, y en su lugar las atribuyó a la mejora experimentada por la ciudad malagueña.
En declaraciones realizadas en la propia ciudad de Marbella sobre la actualidad política, Arenas reconoció que todo lo relacionado con Obama tiene «mucha proyección mediática», por lo que el hecho de que su esposa y una de sus hijas haya escogido esta localidad para pasar unos días de vacaciones le parece una «noticia positiva».
No obstante, el dirigente popular atribuyó la elección a que ahora, tras los años en que fue gobernada por el GIL, «la normalidad impera en Marbella», y se vuelve a hablar de la ciudad y sus bondades para el turismo cuando durante unos años «sólo se hablaba de sus gobernantes».
Para Arenas, la visita de la familia Obama «tiene poco que ver con las relaciones internacionales y mucho que ver con las mejoras en la ciudad de Marbella».
