El político y jurista español Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón ha defendido este miércoles la vigencia del Estado de las Autonomías porque «no se pueden negar la pluralidad y los hechos diferenciales que en España hay», cada uno «diferente», con «su propia identidad y características», que «exigen el reconocimiento de su autonomía» y que, a la vez, deben «vivir coordinada y solidariamente en un conjunto plural».
Herrero y Rodríguez de Miñón ha presentado en Zaragoza el libro ‘Aragonesismo austracista (1734-1742), escritos del Conde Juan Amor de Soria. Estudio introductorio de Ernest Lluch’, en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, acto al que también ha asistido la consejera de Presidencia del Gobierno de Aragón, Eva Almunia.
En opinión del político y jurista, el Estado de las Autonomías sigue siendo un modelo válido, aunque «se puede perfeccionar» y «habrá cuestiones que resolver», y es «muy importante y útil si se sabe manejar bien para la convivencia de los españoles».
Herrero y Rodríguez de Miñón ha relatado que, precisamente, el libro que se ha presentado este miércoles saca a la luz la figura del Conde Juan Amor de Soria quien realizó una teoría sobre la organización del Estado español a partir de lo que había sido la Corona de Aragón, es decir, «del reconocimiento de diversos cuerpos políticos singulares, cada uno con su propia identidad y características, pero capaces de convivir solidariamente en una organización política plural».
Según este miembro nato del Consejo de Estado, eso es «lo que la Corona de Aragón había conseguido y que crea los que los historiadores actuales llaman una tradición mediterránea de organización constitucional, que Amor de Soria pretendían proyectar a España entera».
Al respecto, ha continuado, «Lluch decía, y tenía razón, que esa idea estuvo frustrada desde el siglo XVIII hasta la Constitución de 1978» y es «lo que el Estado de las Autonomías trata de realizar a la altura de nuestros tiempos».
Herrero y Rodríguez de Miñón ha planteado que si bien esto «plantea numerosísimos problemas», son «los problemas que la vida y la realidad plantea y los políticos están obligados a no negar la realidad, sino a pechar con ella y resolver los problemas».
LLUCH SIGUE PRESENTE
El político y jurista español ha recordado a Ernest Lluch como un «gran y fraternal amigo» y ha transmitido su emoción porque siga «presente entre nosotros por sus múltiples amigos, sus discípulos y la Fundación Ernest Lluch», diez años después de haber sido asesinado por ETA.
En su opinión, es «una emoción muy positiva» y «no se tiene nostalgia, sino un recuerdo gozoso de una persona que fue ejemplar», ha dicho, también en relación con la creación por parte de la Universidad de Zaragoza y de la Fundación de la Cátedra Ernest Lluch de Historia del Pensamiento Económico.
El rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, y el vicepresidente de la Fundación Ernest Lluch, Lluis Maria de Puig, han firmado este miércoles un convenio de colaboración para crear la citada cátedra, la primera de Historia de Pensamiento Económico que se dedica en España a Ernest Lluch y la que hace la número 34 de la Universidad de Zaragoza.
Por lo que respecta a la presentación del libro ‘El Austracismo Aragonés’, tendría que haberse presentado hace diez años, justo un día después de que su autor fuera asesinado por la banda terrorista ETA.
Herrero y Rodríguez de Miñón ha relatado que corrigió las galeradas de esta obra en el extranjero y viajó desde Italia al entierro de Lluch en Barcelona «con las galeradas debajo del brazo». El libro salió pocas semanas después «y no se pudo presentar en aquella ocasión». El texto «es para mí muy entrañable porque me está dedicado y es su obra póstuma», ha agregado.
El director de la Institución Fernando el Católico, Carlos Forcadell, que ha facilitado la reedición del libro, ha asistido al acto, junto con Montserrat Lamarca, compañera de Lluch; Lluis María de Puig; Mario Romeo; Josep María de Carreras y Ferriol Soria, delegación catalana de la Fundación.
Este acto es el primero de una serie de actos que se celebrarán en España para conmemorar los ’10 años sin Ernest Lluch’. La consejera de Presidencia, Eva Almunia, ha señalado que este miércoles se hace un «reconocimiento a una persona y a un gran intelectual que apreciaba esta tierra» y «que trabajó mucho con la Universidad de Zaragoza».
Almunia ha señalado que como ministro de Sanidad «sentó las bases del Estado de bienestar» y como rector de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) dio inicio a la UIMP Pirineos para que «nuestras montañas se abrieran también a la formación».
CATEDRA Y HOMENAJE
El rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, ha señalado que la presentación del libro y la firma de la cátedra a los diez años del asesinato de Lluch es «una magnífica ocasión» de «homenaje» al economista, historiador y político.
López ha subrayado que Lluch fue un «gran universitario», «padre de la sanidad pública española» y «símbolo de la democracia» por lo que ha señalado «es del mayor interés para la Universidad de Zaragoza que su figura inspire» una cátedra dedicada al ámbito económico.
En esta línea, la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Comunicación, Pilar Zaragoza, ha remarcado que la cátedra tendrá a Lluch como «punto de referencia para las actividades que organice», además de servir para «visibilizar su figura».
El presidente de la Sección Aragonesa de la Fundación Ernest Lluch, Alfonso Sánchez Hormigó, ha sostenido que éste fue «fundamentalmente un universitario, un académico» y ese será el carácter de la cátedra, que centrará su actividad inicial en la organización de cursos y seminarios sobre actualidad económica y en la edición de publicaciones.
Asimismo, pretende promover la colaboración entre universidad y fundación para el apoyo a proyectos de investigación, tesis doctorales y proyectos de fin de carrera; la promoción de prácticas de estudiantes; la concesión de premios y becas; y la organización de actividades de comunicación y formativas.
Todas estas acciones supondrán la difusión del pensamiento y obra de Lluch y la generación de conocimiento en las áreas relacionadas con su actividad intelectual, fundamentalmente Economía, Historia, Pensamiento Económico y Sanidad.
