El vicepresidente primero del Gobierno, Afredo Pérez Rubalcaba, ha avalado este viernes el modelo lingüístico en la enseñanza en Cataluña porque, en su opinión, el Tribunal Supremo en su sentencia del pasado diciembre «no lo cuestiona».
La sentencia, de finales de diciembre, señala que el Gobierno de Cataluña «deberá adoptar cuantas medidas sean precisas» para que el castellano se considere también lengua vehicular en el sistema educativo obligatorio, conjuntamente con el catalán.
Con esta premisa, Rubalcaba ha afirmado en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros que la sentencia del Supremo «no cuestiona la constitucionalidad» de la Ley de Educación Catalana, de modo que la «da por buena».
Así pues, el vicepresidente y ministro del Interior se ha limitado a decir que es a la Generalitat a la que «corresponde» aplicar la ley en virtud de la sentencia del Supremo, a pesar de que tanto CiU como el PSC anunciaron que no la acatarían. De este modo, ha eludido decir si el PSOE respaldará que los socialistas catalanes llamen a incumplirla.