CiU supera en intención de voto al PSC de cara a las próximas elecciones generales de 2012, por primera vez desde que en junio de 2005 comenzaron a realizarse las encuestas del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) de la Generalitat.
Los resultados suponen un vuelco «histórico», según ha explicado el director del CEO, Jordi Argelaguet, por ser la primera vez que se dan estos resultados en los que, según ha explicado, CiU recupera el espacio que tenía en las décadas de los 80 y los 90.
Según la primera encuesta del año del CEO dada a conocer este viernes, el 21,8% de los catalanes tiene previsto votar a CiU en las elecciones generales, frente a un 19% que ha asegurado que darán su confianza a los socialistas, cuando en el pasado sondeo de otoño el porcentaje era de 18,2% para la federación y 20,2% para el PSC.
El buen momento de CiU también se refleja en la intención de voto de las autonómicas, donde la federación nacionalista sube 10 puntos respecto al barómetro de otoño –de 34,5% al 24,4%–, mientras que el PSC baja del 14,2% al 11,5% y se queda a 23 puntos de los convergentes.
También en la valoración de líderes CiU sale como el partido mejor parado, con su portavoz en el Congreso, Josep Antoni Duran, liderando la clasificación (6,41), y con el presidente de la Generalitat, Artur Mas, en segunda posición (6,28), mientras que el líder parlamentario del PSC, Joaquim Nadal, también aprueba (5,10) pero se queda lejos de sus rivales.
«NO SON TONTOS»
Mas ha asegurado que estos datos demuestran que los catalanes «no son tontos» y entienden su política de ajustes, y ha destacado que los resultados del primer barómetro bajo su mandato le estimulan a seguir trabajando para salir de la crisis.
También ha augurado que esta interpretación del CEO cambie con el tiempo, alegando que es probable «porque cuando hay que hacer un trabajo difícil, siempre habrá quien se resienta de ello».
En las filas de la federación nacionalista también han celebrado los resultados, y su portavoz parlamentario, Jordi Turull, ha recalcado que certifican «el rigor, la seriedad y el liderazgo» con el que está actuando el Govern.
