El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha afirmado este jueves que la Constitución «se puede reformar» y que, por ello, su partido tiene la «voluntad política» de propiciar una reforma que contribuya a dar una solución «pactada y duradera al conflicto vasco y a la crisis institucional y política».
En una artículo escrito este jueves en su blog, titulado «La reforma constitucional es posible», Urkullu hace suya la declaración que realizó la formación jeltzale en 1978 en pleno debate constituyente.
En aquella ocasión, el PNV advertía de que «fórmulas uniformistas de un templado regionalismo» tan sólo lograrán «perpetuar la protesta histórica» del pueblo vasco, «que tiene problemas muy específicos, entre ellos el de ver peligrar su propia identidad».
En ese sentido, el dirigente del EBB precisa que, hoy en día, se asiste en el Estado a una «nueva oleada uniformadora» por parte de la clase política española, que, a su juicio, actúa, con la pretensión de iniciar el nuevo tiempo «sin plantearse dar respuesta política al problema nacional vasco».
Desde ese punto de vista, y ante la «oportunidad histórica» de modificación constitucional planteada por el PSE con el apoyo del PP, Urkullu ha explicado que su partido propondrá una reforma, como una medida política «profunda», que propicie «una solución de futuro al contencioso vasco».
«Nuestra propuesta -explica- se asienta en la enmienda presentada por el Grupo Vasco en el período de tramitación de la Constitución en el año 1978, así como en la resolución aprobada por el Parlamento vasco en 1990, en la que se plantea la potestad de los ciudadanos vascos para decidir libre y democráticamente su estatus político».
Urkullu agrega que la propuesta que realizan «sólo requiere la aceptación de la realidad plurinacional del Estado español», de forma que pueda lograrse «un nuevo Acuerdo que propicie la constitucionalización de los Derechos Históricos».
