La defensa de la lengua y un llamamiento a la unidad para que Cataluña supere «el callejón sin salida» en el que está metida han centrado el acto de la Diada de Cataluña en Girona; un acto que por primera vez han organizado conjuntamente, en la delegación del Govern, la Generalitat, la Diputación y el Ayuntamiento de Girona.
El delegado de la Generalitat en Girona, Eudald Casadesús, ha recordado que Cataluña es un país con personalidad propia y bien diferenciada , y ha añadido que en los últimos días una «nueva amenaza a una cosa tan esencial para el país como es el uso de la lengua propia», que se suma a la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) contra el Estatut y la precipitada reforma de la Constitución.
«La inmersión lingüística en la escuela ha sido clave para la integración de mucha gente en Cataluña; es un modelo de éxito y de cohesión social reconocido internacionalmente y con un amplio consenso político y social», ha expuesto en su discurso.
En este sentido, también se ha pronunciado el presidente de la Diputación y alcalde de Salt, Jaume Torramadé, quién ha insistido en que la inmersión lingüística es un modelo «válido y eficaz» y el más adecuado e idóneo para Cataluña; por ello ha pedido unir esfuerzos para defender un modelo que ha demostrado plenamente que funciona.
Casadesús también ha lamentado que, de manera reiterada, los catalanes se vean obligados a celebrar la Diada «de forma más reivindicativa que festiva», ya que el 11 de septiembre es una fecha para poner en valor la capacidad constante de reconstrucción y recuperación de los catalanes.
«Porque en Cataluña hay talento, porque hay empuje y porque existe la fuerza de mucha gente que con su trabajo y esfuerzo diario son el mejor ejemplo de superación de cara al futuro», ha continuado.
Casadesús ha cerrado su discurso afirmando que el gran reto de Cataluña es «abrir la transición catalana basada en el derecho a decidir, con el pacto fiscal como primer objetivo» y es que, en opinión del delegado, Cataluña es una nación y tiene el derecho democrático de decidir lo que más le conviene como pueblo.
CALLEJON SIN SALIDA
El alcalde de Girona, Carles Puigdemont, ha fotografiado la situación actual de la ciudad y de Cataluña, «pintada de preocupación» y en un callejón sin salida por culpa de las crisis económica, social, medioambiental y nacional.
«Los representantes políticos tenemos que marcarnos como obligación sacar el país de este atasco y abrir diferentes futuros a los catalanes» ha apuntado.
Por ello, «hay que reforzar todo aquello que nos una para que Cataluña sea un país libre», ha expuesto el alcalde gerundense.
RECUERDO AL PRESIDENTE IRLA
Los representantes de las principales instituciones gerundenses han empezado la Diada con una ofrenda floral en la tumba del presidente de la Generalitat en el exilio desde 1940 hasta 1954, Josep Irla, en Sant Feliu de Guíxols.
Así, el tradicional acto se ha convertido en una reivindicación a favor de la lengua catalana y del país; por ello, Casadesús ha instado a los ciudadanos de Cataluña a dar una única respuesta al menosprecio que se está viviendo últimamente con la «defensa imperturbable» de la identidad catalana.
Las instituciones han hecho un llamamiento a los catalanes para que se inspiren en la figura de Irla, sobretodo por su «reflexión, juicio y decisión», para impulsar Cataluña.
Finalmente, Torramadé, ha apuntado que el presidente Irla tiene muchas «calidades alentadoras» en las que los ciudadanos pueden mirarse.
