La futura dirección de ERC arropa a Bosch y llama a enterrar el cainismo en el partido

El futuro presidente de ERC, Oriol Junqueras, y la próxima secretaria general del partido, Marta Rovira, han arropado este viernes al escritor e historiador Alfred Bosch en el último acto del candidato antes de las primarias que este sábado le enfrentarán a Joan Ridao por liderar el partido en las elecciones generales del 20 de noviembre.

El acto, que ha reunido a un centenar de simpatizantes de ERC y al que ha asistido gran parte del equipo que debe liderar el partido junto a Junqueras tras el congreso de los republicanos, ha girado en torno a la necesidad de enterrar el cainismo que ha imperado en la formación independentista en los últimos años y que ha provocado innumerables disputas internas.

Por ello, pocas horas antes de que la militancia dirima quien debe ser el futuro líder de ERC en el Congreso en las primarias de este sábado, han sido constantes las peticiones de salir cohesionados del cónclave y encarar con unidad el futuro del partido, en el que Junqueras deberá reflotar una formación que ha retrocedido significativamente en todos los comicios desde las generales de 2008.

El propio Alfred Bosch ha reclamado a los asistentes el compromiso de que todo el partido apoye sin reservas al vencedor de las primarias de este sábado, sea quien sea, y ha asegurado que él mismo será el primero en arropar a Ridao si éste se impone.

«Si es Ridao, ese será el candidato de todos. Será mi candidato», ha zanjado Bosch, que ha llamado a los militantes de ERC a hacer piña para sacar adelante el proyecto desde el primer minuto tras conocerse los resultados de la votación.

En la misma línea, el eurodiputado de ERC y alcalde de Sant Vicenç dels Horts, Oriol Junqueras, ha agradecido la generosidad de aquellos que han aceptado dar un paso al lado para la renovación del partido, y se ha referido en concreto al todavía presidente de los republicanos, Joan Puigercós.

Junqueras, que ha ensalzado la labor de todos los que le han precedido en la dirección de ERC desde su fundación, se ha mostrado convencido de que estarán a la altura de la responsabilidad que les ha recaído siempre y cuando su partido sea «persistente, constante, se esfuerce y trabaje colectivamente».

El eurodiputado –al que la militancia debe confirmar este sábado como futuro líder del partido– pondrá a prueba su crédito ante los afiliados el primer día como presidente, ya que siempre ha apostado por Bosch, por lo que una victoria de Ridao significaría empezar su andadura al frente del partido con una derrota.

«MUSCULAR EL PARTIDO»

La candidata a secretaria general de los independentistas, Marta Rovira, ha asegurado que trabajará por el fortalecimiento interno del partido con el objetivo de que la dirección represente a todas las sensibilidades y sea un «ejemplo de cohesión» para superar las luchas cainitas que se han repetido en los últimos años en ERC.

Al acto han asistido miembros del equipo con el que Junqueras aspira a liderar el partido como la actual portavoz parlamentaria, Anna Simó, los diputados Oriol Amorós y Pere Aragonès, el líder de ERC en el Ayuntamiento, Jordi Portabella, los ex concejales de Barcelona Esther Capella, Xavier Florensa y Ricard Martínez, y el alcalde de Caldes de Montbui, Jordi Solé.

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