La portavoz del Consejo, Lola Johnson, ha afirmado este viernes que es el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, quien debe decidir si quita el sueldo a la oposición de la institución, y considera que las diputaciones son «muy importantes», sobre todo de cara a municipios muy pequeños.
Johnson se ha pronunciado en estos términos en la rueda de prensa posterior al pleno del Consejo tras ser preguntada por las declaraciones efectuadas por Rus en las que amenazaba a la oposición con eliminar sus retribuciones por abogar por la desaparición de la institución.
Al respecto, la portavoz ha señalado que las declaraciones efectuadas por Rus «iban directamente dirigidas a un grupo de diputados y asesores que vino a decir que no compartía claramente la institución». Y respecto a la posibilidad de retirarles el sueldo ha indicado que es una decisión «que debe tomar Rus». «El Consejo –ha agregado– responde de las políticas de la administración que le corresponde y Rus ha compartido una reflexión y ha pedido una reflexión a todos los miembros de su institución».
También ha aclarado que «la crítica siempre es perfecta cuando es positiva y es para cambiar», pero en este caso «se trata de una crítica a la desaparición del modelo, que es la Diputación». Así, «no se plantea una crítica sobre cómo podría ser, cómo se podría mejorar o cómo asumir sus servicios, sino que se plantea la desaparición», algo que, por otro lado, «entra dentro de sus derechos –de la oposición–«.
Al ser preguntada por si se imagina al expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, quitando el suelo a los diputados que le criticaban, ha respondido que no se lo imagina, y ha reiterado que «si la crítica es constructiva, ayuda a mejorar las cosas, pero otra cosa es negar, que es diferente», ha repetido.
«HAY QUE REVISAR»
También ha afirmado que desde el Gobierno valenciano se piensa que ha llegado un momento en el que «hay que revisar muchas competencias de los distintos niveles de las administraciones, porque la historia evoluciona y día a día y año a año se va construyendo».
No obstante, ha puntualizado que las diputaciones «siguen siendo muy importantes y siguen teniendo un papel muy importante, sobre todo de cara a municipios muy pequeños». «El hecho de que se ponga encima de la mesa esta reorganización de competencias es para que la suma de las administraciones evite duplicidades y sea mucho más eficaz de cara al ciudadano», ha añadido.
De momento, las consejerías están tratando de manera sectorial todas aquellas competencias y líneas de trabajo que mantienen las diferentes diputaciones en las diferentes áreas. «A partir de ahí saldrá un gran mapa que nos permitirá a todos tener una visión de qué competencias hay que reorganizar, suprimir, cambiar, reubicar, y luego ya podremos hacerlo de manera global», ha dicho.
Johnson ha indicado que Rus es «soberano» para tomar decisiones, y ha recordado que esta semana se ha reunido con la presidenta de la Diputación de Alicante, con la que ha tratado el tema de reordenar las competencias de las diputaciones y de los municipios «para conseguir que las tres administraciones trabajen de una manera eficaz para el ciudadano».
