El 75,5% de los madrileños tenía decidido a quién votar en las elecciones autonómicas del 22M antes de la campaña

El 75,5 por ciento de los madrileños tenía decidido a qué partido votar en las últimas elecciones autonómicas del 22 de mayo antes de que comenzara la campaña electoral, que resultó indiferente para la elección de voto del 68,2 por ciento de los ciudadanos, según se desprende de una encuesta realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) en la Comunidad de Madrid entre mayo y julio de este año.

Preguntados por cuándo decidieron el sentido del voto que finalmente llevaron a cabo, el 75,5 por ciento de los madrileños encuestados afirmó que ‘hace bastante tiempo’, frente al 11 por ciento que lo decidió ‘durante la última semana de campaña’ o el 8,6 por ciento que lo hizo ‘el mismo día de las elecciones’.

Los votantes del PP fueron los que mayoritariamente tenían asumida su decisión antes de que se abriera la campaña electoral (85,2 por ciento), y también entre quienes votaron a los socialistas había un alto grado de decisión (80,7 por ciento).

De hecho, el 62 por ciento de los madrileños tenía decidido votar por un partido o coalición concreta, cifra que alcanza el 87,4 por ciento entre quienes se decantaron por el PP y del 78,6 por ciento entre quienes votaron al PSOE. También el 58,3 por ciento de los votantes de IU tenían tomada su decisión.

Frente a esto, un 10,2 por ciento dudó entre varios partidos (mayoritariamente entre PP y PSOE, el 13 por ciento, y entre PSOE e IU, el 11,4 por ciento), y un 12,5 por ciento tenía decidido abstenerse.

Ante estos resultados, el 68,2 por ciento de los encuestados reconoce que la campaña electoral no influyó ‘nada’ en su voto y otro 19,8 por ciento dice que las dos semanas de campaña tuvieron ‘poca’ incidencia en su decisión final.

Además, para el 77,9 por ciento de los madrileños la campaña electoral sirvió ‘poco’ o ‘nada’ para informarse sobre los programas y propuestas de cada partido o para conocer mejor a los candidatos, y al 77,4 tampoco le ayudó a ver las diferencias entre unas opciones políticas y otras.

Con estos resultados se entiende que el 69,8 por ciento de los encuestados diga estar ‘bastante’ o ‘muy de acuerdo’ con que quienes están en el poder «siempre buscan sus intereses personales», un motivo que podría llevar a la desafección con los políticos.

También son mayoría (72,7 por ciento) los que sienten que los políticos no se preocupan mucho de la gente como ellos, y el 58,5 por ciento cree que no está mejor informado sobre política que la mayoría de la gente.

LA CAMPAÑA NO INTERESA

Con estos datos se entiende que el 56,9 por ciento de los madrileños haya seguido la campaña electoral autonómica con poco o ningún interés, frente al 35,8 por ciento que asegura tener ‘bastante’ o ‘mucho interés’ por este asunto.

De hecho, el 51,6 por ciento no siguió ‘nunca o casi nunca’ la campaña a través de la radio y el 30,9 por ciento tampoco leyó sobre este tema en los periódicos, aunque el 49,5 por ciento sí se mantuvo informado de forma diaria a través de la televisión.

Así, el debate televisado entre los candidatos a la Presidencia regional fue seguido, entero o en parte, por el 47,4 por ciento, mientras que el 51,7 por ciento de los madrileños no lo vio.

También son mayoritarios quienes no leyeron los folletos de propaganda (55,4 por ciento), ni contribuyeron económicamente con algún partido (97,7 por ciento), ni trabajaron como voluntarios en las campañas (97,9 por ciento) ni asistieron a mítines (92,7 por ciento).

E-CAMPAÑA

Además, el esfuerzo realizado por los partidos políticos para aumentar su presencia electoral en Internet parecería haber caído en saco roto, ya que el 71,9 por ciento de los madrileños no siguió la campaña a través de este medio, y casi la mitad del 27 por ciento que sí lo hizo acudió a estos recursos una vez a la semana.

Eso sí, para informarse en la Red sobre la campaña electoral el 90 por ciento de los madrileños eligieron páginas de medios de comunicación tradicionales (periódicos, radios) y un 26,5 por ciento prefirió los blogs y foros de debate. Frente a eso, sólo un 12,4 por ciento entró en las páginas de los partidos o candidatos.

Aun así, la campaña electoral sí estuvo presente en las conversaciones habituales en las dos semanas previas a las elecciones autonómicas. El 69,6 por ciento habló de este tema ‘habitualmente’ o ‘de vez en cuando’ en casa y con sus familiares, y el 63,3 por ciento lo hizo también de forma frecuente con sus amigos.

CAMPAÑAS REGULARES

Pero incluso para quienes tienen una actitud positiva ante la campaña electoral la ejecución práctica de la misma por parte de los partidos también ha dejado qué desear. Y es que la mayoría de los encuestados considera que las campañas han sido ‘regulares’.

En concreto, la campaña del PP ha sido vista como ‘muy buena’ por el 21,4 por ciento de los electores (el dato alcanza el 43,9 por ciento entre sus votantes) aunque un 24 por ciento cree que ha sido ‘regular’ y un 21,8 por ciento, que fue ‘mala’.

Por su parte, el 32,4 por ciento de los encuestados califica de ‘mala’ la campaña socialista y un 26,2 por ciento de ‘regular’, dato que llega hasta el 42,1 por ciento entre los propios votantes del PSOE. Más del 50 por ciento de quienes votaron al PP opina que la campaña de los socialistas fue ‘mala’ o ‘muy mala’.

En el caso de IU, el 27,9 por ciento de los encuestados no sabe responder a la pregunta sobre la campaña electoral de la coalición de izquierdas, que es valorada como ‘regular’ por el 27,8 por ciento de los encuestados y como ‘mala’ por el 22,1 por ciento.

También el desconocimiento es la opción mayoritaria al opinar sobre Unión, Progreso y Democracia (UPyD). Así, el 34,9 por ciento reconoce no saber cómo se desarrolló su campaña, frente al 22,6 por ciento que la califica de ‘regular’ y el 17,6 por ciento que dice que fue ‘mala’.

RAZON DE VOTO

En cuanto a las razones tenidas en cuenta a la hora de elegir el partido al que votar, el 40,2 por ciento de los encuestados reconoce en el estudio del CIS que los temas nacionales fueron los que más pesaron, frente al 36,1 por ciento que decidió en función de la situación de la región.

Además, el 17 por ciento emitió el llamado voto de castigo, ya que reconoce que tomó su decisión «para evitar que ganase otra fuerza política».

Frente a eso, el 20,4 por ciento eligió «a quien mejor representa las ideas de la gente como yo» y el 18,8 por ciento consideró que se trataba de «la fuerza que mejor defiende los intereses de Madrid».

Preguntados finalmente por su valoración de los resultados del 22 de mayo, el 24,3 por ciento considera que son ‘más bien positivos’ y el 19,2 por ciento los ve ‘muy positivamente’, frente al 20,4 por ciento que considera que fueron ‘más bien negativos’ y al 17,6 por ciento que asegura que fueron ‘muy negativos’.

Así, entre la mitad de los votantes socialistas considera negativos los resultados electorales y otro 32,1 por ciento los ve ‘muy negativamente’. Frente a eso, el 50,3 por ciento de los ‘populares’ los califica de ‘muy positivos’ y otro 40,6 por ciento, de ‘más bien positivos’.

Además, casi seis de cada diez votantes de IU considera ‘muy negativos’ los resultados de los comicios, y en UPyD las opiniones están más repartidas entre quienes lo ven ‘más bien positivamente’ (26,8 por ciento) y quienes lo ven ‘ni positivo ni negativo’ y ‘más bien negativamente’ (25 por ciento respectivamente).

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