El presidente del grupo del PSC en el Parlamento catalán, Joaquim Nadal, ha usado hoy un tono inusualmente duro para arremeter contra el presidente catalán, Artur Mas, por los recortes que aplica el Govern, y ha sentenciado que el Ejecutivo catalán «no pide sacrificios, sino que prepara la inmolación».
En la segunda jornada del debate de política general en el Parlamento catalán, el presidente del grupo parlamentario del PSC ha remarcado que el Govern de CiU «ha iniciado un programa inexorable de desmantelamiento de los servicios públicos, en lugar de un programa reformista, y un camino sin retorno de privatizaciones».
En un momento de su discurso, ha afirmado que Mas ya no es el presidente «de todos», sino de unos «cuantos», y ha espetado: «Usted es el presidente del enfermo diagnosticado de cáncer de pulmón que sabe que la intervención es apremiante, que el tiempo cuenta y que sabe que con los recortes tiene para tres meses».
Nadal ha subrayado que el país está «peor» que hace un año, le ha acusado de fundamentar los recortes en una «política del miedo» y de quebrar la «cohesión social», aunque, a pesar de esta crítica rotunda, ha ofrecido al Govern sellar un «acuerdo de país» para salir de la situación actual.
El dirigente socialista ha asegurado que la «regeneración» de Cataluña pasa por «grandes acuerdos» y no por «falsos consensos» o por pactos «coyunturales», si bien buena parte de su discurso se ha centrado en atacar al Ejecutivo por la forma cómo está ajustando las cuentas públicas.
«Ha de ser el presidente de la mujer víctima de violencia machista que no ha cobrado la Renta Mínima de Inserción de agosto y septiembre porque el cheque, en su momento, se envió al municipio donde vive su agresor», le ha espetado también Nadal, que ha pedido al presidente que «ponga rostro humano a la nación» y mire «a los ojos de la gente».
El dirigente socialista ha recordado cada uno de los recortes del Govern en sanidad, educación y bienestar social, y ha opinado que hay una salida «menos traumática» a la crisis económica actual.
Ha avalado el cumplimento del déficit público marcado, pero ha instado al Govern a no «hipnotizarse» con el control de la deuda y el déficit, porque «hemos de recortar, sí, pero hemos de vender», ha apostillado el presidente del grupo parlamentario del PSC.
Nadal ha descrito una Cataluña con mayores desigualdades y pobreza, con la «cohesión social y nacional» fracturada, donde la inserción social se ha convertido en «beneficencia» y con un Govern «falto de decisión y cohesión».
Por otra parte, ha recordado al Govern que el PSC respalda el modelo de inmersión lingüística y le ha reprochado que le equiparara en esta materia con el PP.
El jefe de la oposición también ha reivindicado el modelo de financiación pactado por el exconseller Antoni Castells y se ha preguntado de cuánto sería el déficit público catalán si estuviera en vigor el anterior modelo, al tiempo que ha conminado al Govern a desplegar el Estatut y a aplicarlo «en plenitud».
