Valcárcel dice que no quiere el agua «para nada que no sea trabajar»

 

 

 

El presidente del Gobierno murciano, Ramón Luis Valcárcel, ha asegurado este lunes que no tiene ningún deseo de «polemizar» con ninguna comunidad autónoma, tras lo que ha confesado sentirse «ridículo» abriendo debates con CCAA vecinas o no vecinas, ya que el agua, ha matizado, «es un bien de Estado y no corresponde a Valcárcel ni a De Cospedal», entre otros presidentes, «abrir debates sobre de dónde tiene que llegar el agua de no sé qué sitio a no sé qué lugar».

 

 

En una entrevista concedida a Onda Cero y recogida por Europa Press, Valcárcel ha insistido en que los presidentes autonómicos «no tienen nada que ver en este asunto», por lo que ha considerado que hay que reclamar el agua, al ser ésta una herramienta de «desarrollo».

 

 

En esta línea, ha dejado claro que «no queremos el agua para nada que no sea trabajar, no queremos que nadie subvencione nuestra agricultura, queremos herramientas para seguir trabajando y manteniendo algo que genera riqueza».

 

 

«Por qué no voy a reclamar yo algo que está generando 70.000 puestos de trabajo, que mantiene el nivel de exportaciones y contribuye al enriquecimiento del PIB nacional», se ha preguntado Valcárcel, para después subrayar que el Gobierno de Mariano Rajoy «tiene muy claro que se tiene que llegar a un acuerdo nacional del agua, un gran pacto nacional»; cuestión ésta abordada tan solo hace unos días en la reunión que el ministro de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, mantuvo con Valcárcel.

 

 

PACTO DEL AGUA DE ARAGON

 

 

A partir de este momento, ha indicado el jefe del Ejecutivo regional, «alcanzar un acuerdo que ya tiene algunos pilares sobre el cual sustentarse, uno de ellos el Pacto del Agua de Aragón», ya que, ha recordado, «está claro que lo dice el programa electoral y es algo que anhelan los aragoneses desde el año 1992 y han pasado muchos años y nada se ha hecho sobre esto».

 

 

Por ello, ha hecho un llamamiento a ponerse manos a la obra, porque Aragón «es España y los aragoneses son españoles y requieren de una regulación de su propia cuenca a partir del esfuerzo, compromiso y solidaridad a través del presupuesto de todos los españoles».

 

 

En esta línea, Valcárcel ha explicado que también se ha dicho que la cuenca que cede el agua «tiene la preferencia y esto es así no solo porque lo diga el programa electoral, sino que la primera ley que se ha hecho con respecto a un trasvase ya existente, desde el Tajo al Segura, en donde ya se recoge esa prioridad de cuenca como tal cuenca cedente».

 

 

A partir de ese momento, «hablamos de la solidaridad interterritorial, donde entran muchos mecanismos que se llamarán trasvases, mejor uso del agua, racionalización de la misma, aplicación de las tecnologías de vanguardia para pode obtener agua por ejemplo a partir de la salinización no a los costes que hoy día se están produciendo que hace inviable cualquier actividad económica, y por supuesto también en la cesión de usos de derechos de agua porque en España hay mucha gente que tiene un derecho adquirido para utilizar un agua que después no utiliza, pues ese agua puede ser perfectamente vendida en un mercado libre dentro de un sistema de libertad regulado por el Gobierno o quien tenga que hacerlo para que las tarifas no se disparen».

 

 

Ello significaría, ha indicado, «una cantidad de agua disponible de quienes la tiene y no la usan para aquellos otros que la necesitan»; en resumen, «un compendio de cuestiones que se tiene que plantar en ese gran debate que al final culmine en el pacto nacional del agua».

 

 

 

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Autor

Irene Ramirez

Irene Ramirez. Responsable de campañas en Grand Step. Fue redactora de Periodista Digital entre 2012 y 2013.

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