Rull: "La actitud del catalanismo ha cambiado con respecto a la de hace 10, 20 o 30 años, debido a la incapacidad manifiesta del Estado español para entender a Cataluña"
El secretario de organización de CDC, Josep Rull, ha lanzado una advertencia al Gobierno español de cara a la negociación de la propuesta de nueva financiación para Cataluña: «El dilema está servido: o hay pacto fiscal o se empieza la vía hacia el Estado propio. O pacto fiscal o independencia».
En una entrevista con la agencia Efe, Rull ha llamado al Estado español a aprovechar la «enésima propuesta de pacto» planteada desde las instituciones catalanas, en alusión al modelo de pacto fiscal aprobado por el Parlament el pasado 25 de julio, con los votos de CiU, ICV-EUiA, ERC y el aval parcial de PSC.
En su opinión, esta negociación representa para España «una gran oportunidad para demostrar que Cataluña no le interesa sólo por el dinero», puesto que hasta ahora da la sensación de que se busca la «asfixia económica y financiera premeditada» de los catalanes.
Tras las primeras reacciones contrarias al pacto fiscal desde el Gobierno español, Rull ha reconocido que «no ha sido un buen inicio de las negociaciones», pero aún así el Govern de CiU quiere sentarse a hablar «para ver si es posible un margen de acuerdo».
En caso de que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se tope con «un no rotundo» de Mariano Rajoy, Rull ha advertido de que «Cataluña estará legitimada para abrir otras vías».
Estas otras vías, según Rull, conducirían a un Estado propio: «El debate del pacto fiscal, como ya avisó el secretario general de CDC, Oriol Pujol, es la última estación conocida en las relaciones entre Cataluña y España», ha remarcado.
Rull ha reconocido que en los últimos tiempos, después de que el Tribunal Constitucional haya recortado un Estatut refrendado por el pueblo de Cataluña y después del trato dispensado por PP y PSOE a las reivindicaciones catalanas, el «nacionalismo mayoritario» que encarna CiU ha experimentado un «cambio de cultura política y de estrategia».
Según Rull, «la actitud del catalanismo ha cambiado con respecto a la de hace 10, 20 o 30 años, debido a la incapacidad manifiesta del Estado español para entender a Cataluña».
Si hace unos años habría sido impensable escuchar por boca de un dirigente de CiU un pronunciamiento oficial en favor de la variante independentista, desde el congreso que celebró CDC el pasado marzo esta alternativa se ha ido consolidando como el horizonte nacional al que aspiran los convergentes.
Ya en el congreso del partido que preside Mas se acordó fijar como objetivo la construcción de un Estado propio, pero además dentro de la ponencia política se incluyó un pasaje muy explícito que entonces pasó desapercibido para la opinión pública.
«La denegación por parte del Gobierno español del pacto fiscal sería la condición necesaria y suficiente para convocar un referéndum de autodeterminación», señala un punto del texto.
El proyecto de ley de consultas populares que está tramitando el Parlament puede ser una herramienta para cumplir este propósito, si bien Rull contempla otras posibles fórmulas para que el pueblo de Cataluña se pronuncie sobre su futuro colectivo.
Una de estas alternativas sería convocar unas «elecciones con carácter plebiscitario», en las que las distintas fuerzas políticas acudirían con un programa electoral claramente definido sobre un Estado propio para Cataluña: si las formaciones defensoras de la independencia obtuviesen una mayoría muy amplia, el Parlamento catalán podría declarar directamente la separación de España.
Un mecanismo que exprese la volunta del pueblo
«Cualquier mecanismo que permita una expresión directa de la voluntad del pueblo de Cataluña será válido», ha indicado Rull, que en todo caso ha resaltado que la respuesta del país ante un eventual portazo al pacto fiscal «no será de resignación».
Rull se ha mostrado convencido de que «al final prevalecerá lo que exprese la mayoría del pueblo de Cataluña» y ha subrayado que «el derecho a decidir no es un ejercicio de victimismo, sino un mecanismo para dejar de ser víctima».