El jefe del Ejecutivo riojano, Pedro Sanz, ha trasladado hoy un mensaje de confianza a la sociedad riojana de que «ha merecido la pena» el esfuerzo que se está realizando porque cree que se empieza a «ver una luz, aunque sea débil», hacia la recuperación económica.
Sanz, en una comparecencia de prensa, ha dicho que se ha terminado un año 2012 «complejo» y ha subrayado que comienza un 2013 en el que tiene la esperanza de que se vea el comienzo de la recuperación o «los signos claros de una etapa diferente, que marcará un antes y un después».
El jefe del Ejecutivo riojano ha expresado su confianza en que, «sin duda, 2013 terminará mejor de lo que ha empezado» y ha dicho que hay indicadores que «están ahí», que cree que apuntan en la dirección hacia una etapa diferente a la de 2012.
Entre estos indicadores ha citado los turísticos, la venta de viviendas, los impuestos de transmisiones y bienes patrimoniales, que «han empezado a moverse un poquito», así como «ciertos movimientos en las empresas».
También se ha referido a que el pasado mes de enero, La Rioja, junto con Cantabria, fue la comunidad con menor porcentaje de efectos de comercio impagados sobre los vencidos y fue la cuarta con mayor número de hipotecas constituidas por cien mil habitantes.
Sanz ha asegurado que La Rioja ha comenzado 2013 con «mejores signos» que en 2012 y ha dicho que, aunque son «signos débiles, están ahí» y apuntan a que se «empieza a ver una luz que, aunque sea débil, se irá fortaleciendo».
Ha transmitido un mensaje de esperanza y tranquilidad a la sociedad riojana de que cuenta con un «Gobierno comprometido con su tierra, que tiene sentido de región, que apuesta por el diálogo y que sabe qué hay que hacer y qué camino recorrer».
El presidente ha asegurado que el objetivo en el que trabaja su Gobierno es la búsqueda de la creación de empleo y ha dicho que «mantiene su deseo de rebajar el paro en la comunidad al nueve por ciento en esta legislatura».
Sanz ha recalcado que La Rioja depende del contexto nacional e internacional y ha dicho que, con independencia de ello, el Gobierno riojano tiene la responsabilidad de desarrollar políticas orientadas a que la región se posicione mejor para que pueda salir con «mejor fortaleza» de la crisis de cara al futuro.
También ha dicho que son objetivos de su Gobierno el desarrollo de políticas de incentivación económica, la búsqueda de competitividad, la internacionalización, la investigación y el desarrollo, la mejora de las infraestructuras y el mantenimiento de la calidad en los servicios básicos.
Ha expresado su deseo de que el dato del paro correspondiente al actual mes de marzo sea «sustancialmente mejor» que el del mismo año del año anterior.
Entre otros aspectos y tras aludir a diferentes indicadores, el presidente ha afirmado que «La Rioja ha hecho bien los deberes», al registrar en 2011 el menor déficit de España; el segundo mejor en 2012 y tener «una deuda contenida razonable».
Sanz se ha congratulado de que esta comunidad haya sacado «buena nota» en la gestión de los recursos públicos y de que dé la imagen de una región «solvente y fiable».
Entre otros «hitos» del Gobierno regional en primer trimestre de 2013, ha citado la recuperación del diálogo social con los agentes sociales y económicos, la oferta de empleo público, la aprobación del plan de formación profesional, el pago a proveedores y la mediación integral frente a los desahucios, entre otras.
También ha informado de que, desde que en 1995 La Rioja empezó a adquirir capacidad normativa en materia impuestos, la administración regional ha dejado de ingresar 475 millones de euros, que han revertido en las arcas de los riojanos.
Ha anunciado que este próximo trimestre, su Gobierno aprobará el nuevo Plan de I+D+I 2013-2016, por un importe de 378,47 millones de euros, que ha calificado como «importante»; la aprobación de los anteproyectos de Ley de Hacienda Pública y del Deporte y el Plan de Obras y Servicios a los Ayuntamientos.
Se inaugurará el centro de media estancia de Calahorra, con 75 plazas concertadas y ha dicho que su Gobierno seguirá defendiendo los intereses de La Rioja en distintos ámbitos.
Sobre la figura del Defensor del Pueblo Riojano, ha indicado que hay un «diálogo abierto» entre el PP y el PSOE para designar a la persona que ocupará este cargo, aunque «no es urgente».
Se ha referido a que el Gobierno riojano espera a que mejore la situación económica y haya solvencia financiera para iniciar las obras en la parcela del antiguo Hospital San Millán, donde se ubicará la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales.
También ha aludido a la necesidad de que haya un acuerdo entre las partes para nombrar a la nueva Junta Directiva de la Interprofesional del Vino de Rioja, que «sería muy triste que desapareciera».
El presidente ha insistido en varios momentos de su comparecencia en que su Gobierno quiere seguir apostando por el cumplimiento del plan de estabilidad y el control del gasto, sin renunciar al desarrollo y aplicación de políticas de crecimiento.
Ha concluido con un mensaje de «gratitud» a la sociedad riojana por su «comprensión y paciencia» en las políticas del Gobierno y también a los agentes sociales por su colaboración.