El PP está escandalizado. «Esto es pura ideología», critican al referirirse a las medidas extremas que ha tomado el Ayuntamiento de Madrid e la activación del escenario 3 para episodios de alta contaminación.
Dicen que genera una exagerada alarma cuando lo cierto es que la idea de prohibir del 50 por ciento del tráfico de vehículos surge de un protocolo anticontaminación creado por la inefable Ana Botella en 2015, la misma alcadesa que le soltaba dinerito a Nacho Murgui para que no le montara mareas sanitarias. —Los ‘panolis’ del PP de Madrid le otorgaron al ‘número dos’ de Carmena 7 millones de euros en subvenciones—
Se lo dejaron a huevo a Manuela Carmena. Nada como un protocolo para quitarse un problema medioambiental con el que encima el Ayuntamiento se forrará mutando a los conductores a un ritmo de 7.300 sanciones diarias.
Así lo recoge el último informe de Automovilistas Europeos Asociados, que toma datos de enero a septiembre y señala que, en los nueve primeros meses de 2016, el número de denuncias de tráfico que se han impuesto a los conductores madrileños asciende a 2.018.932.
A falta de soluciones viables, en Twitter comienzan a cachondearse de las medidas dramáticas de un ayuntamiento dispuesto a perseguir a los conductores como si fueran delincuentes:
Si no llueve en diez días, Carmena prohibirá el motor de explosión. Si se llega a veinte días, se abolirá en Madrid el uso de la rueda.
— Hermann Tertsch (@hermanntertsch) 28 de diciembre de 2016
«INJUSTAS E INEFICACES»
La asociación de Automovilistas Europeos Asociados (AEA) ha calificado de «injustas e ineficaces» las restricciones al tráfico en Madrid derivadas de los escenarios anticontaminación decretados por el Ayuntamiento de la capital, y especialmente la activación del Escenario 3 que prohibirá la circulación de vehículos en función de su matrícula par o impar.
En declaraciones a Europa Press Televisión, el presidente de la AEA, Mario Arnaldo, ha explicado que se trata de un episodio de contaminación «difícil pero puntual», por lo que considera que las medidas que se están tomando desde el Ayuntamiento «no son las más adecuadas».
Arnaldo ha señalado que, comparativamente con «otras ciudades europeas» como París o Estocolmo, la contaminación «aún siendo alta no era muy superior»; y de tomar una medida, sería conveniente «restringirlo totalmente», y hacer acopio de un transporte público «reforzado».
En concreto, y respecto a la prohibición de matrículas pares o impares según el día, el presidente ha incidido en que va a provocar «un daño enorme a vecinos, especialmente a los residentes de la almendra», dado que «aquellos que venían de viaje no podrán ir a su casa a descargar el equipaje», y al mismo tiempo «personas que son residentes y trabajan fuera de la almendra central no lo van a poder hacer».
Por tanto, Arnaldo ha subrayado que la gran equivocación sería, en caso de que haya que restringir el tráfico, «no prohibirlo a los más contaminantes, sino por el hecho de que sea par o impar».
«Son fórmulas de laboratorio que luego no se cumplen», ha valorado y ha apostado por medidas «estructurales», en oposición a lo que considera «parches», como «rejuvenecer el parque automovilístico» o «mejorar la flota» del transporte público.
