Como alcaldesa accidental, hará algo más allá de administrar la ausencia de Colau, que está en todos los sitios menos donde se la necesita
La comisión de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona ha reprobado este 8 de agosto de 2018 a la alcaldesa, Ada Colau, y le ha pedido su dimisión como responsable en la materia con los votos del PDeCAT, Cs, ERC, PSC, PP y el concejal no adscrito Gerard Ardanuy, que suman mayoría en la corporación municipal.
Los grupos municipales del PDeCAT, ERC, Cs y PSC forzaron la convocatoria de una comisión extraordinaria por el «deterioro» de Barcelona tras los últimos incidentes con los narcopisos y con el ‘top manta’, después de que un vendedor ambulante agrediera a un turista en la plaza Cataluña y le hiriera de gravedad.
La comisión se ha desarrollado entre críticas de los grupos a la gestión del Gobierno municipal, que ha representado la alcaldesa accidental, Laia Ortiz, mientras que la CUP no ha acudido al considerar que la reprobación, la tercera que recibe Colau en su mandato, es una «escenificación» de la oposición.
Desde el PDeCAT, que es el mayor grupo de la oposición, el concejal Raimond Blasi ha acusado a Colau de no cumplir su responsabilidad como responsable de seguridad desde su investidura y ha asegurado que la ciudad se encuentra «en una situación de degradación constante».
Al terminar la comisión, la candidata de la formación a las elecciones de 2019, Neus Munté, ha lamentado que la Guardia Urbana se encuentra desbordada para hacer frente a fenómenos como el ‘top manta’ y ha acusado a Colau de «no hacer ningún tipo de declaración ni tan siquiera un ‘tuit» tras episodios como la agresión de plaza Cataluña.
La líder municipal de Cs, Carina Mejías, ha justificado la convocatoria de la comisión por «una crisis de convivencia suficientemente grave» y ha señalado a la alcaldesa por lo que considera dejación de funciones.
«Barcelona sale diariamente en las portadas de los diarios internacionales y esto está afectando no sólo a la convivencia y a los vecinos, sino también a la reputación internacional», ha deplorado la edil naranja.
Alfred Bosch (ERC) ha reclamado a Colau que dimita de sus responsabilidades en seguridad y las delegue en una figura de consenso, y ha defendido que «es un síntoma gravísimo de que la seguridad pública no se está llevando bien» el hecho de que vecinos de el Born estén contratando vigilancia privada para hacer frente a los narcopisos y al incivismo.
«Barcelona acabará convirtiéndose en la narcocapital de Europa», ha alertado el líder republicano, que ve un desbarajuste en la gestión de la seguridad de la capital catalana.
La socialista Montserrat Ballarín ha reivindicado el plan de 57 propuestas que ha presentado esta semana su grupo y ha tendido la mano al Gobierno municipal, a quien ha garantizado su apoyo si desaloja a los manteros del Metro y del paseo Joan de Borbó, y si cesa al responsable de turismo que mandó «a la mierda» en Twitter a los que critican su gestión.
Así, ha pedido a Laia Ortiz si, «como alcaldesa accidental, hará algo más allá de administrar la ausencia de Colau, que está en todos los sitios menos donde se la necesita», ya que la primera edil no ha acudido a la comisión.
Desde el PP, Alberto Fernández ha pedido que el Ayuntamiento se persone como acusación popular en la causa abierta por la agresión de plaza Catalunya y en otras que se produzcan a la ciudad, y ha reclamado al Gobierno municipal que exija también responsabilidades a la Generalitat.
«Hace días vimos a los Mossos actuando contra manteros en Salou. ¿Tanto cuesta reclamar que también intervengan en la ciudad de Barcelona?», ha preguntado, donde su presencia es de 3.000 agentes, ha dicho.
También el concejal no adscrito Gerard Ardanuy (Demòcrates) ha apoyado la reprobación de Colau, a quien ha exigido que haga cumplir la normativa como se hace en otras grandes ciudades, como Madrid.
«Que el Gobierno declare la guerra a las mafias, que son las que hacen que hoy tengamos al ‘top manta’ en la calle, con todas las herramientas que nos da la ley».
«Alianza contra Barcelona»
En su turno de réplica, Ortiz ha acusado a la oposición de escenificar este miércoles «una alianza contra Barcelona» con una comisión electoralista, ha dicho, que busca desgastar al Gobierno de Colau y no aportar soluciones.
La también teniente de alcalde de Derechos Sociales, que ha condenado «cualquier agresión y muestra de violencia en las calles de Barcelona, venga de quien venga», ha emplazado a la oposición a hacer propuestas y ha reprochado especialmente al PSC, que estuvo en el Ejecutivo local hasta finales de 2017, que ahora lo critiquen.
